sábado, 28 de junio de 2014

Capítulo 15

-Bueno pero... Pero si vamos a intentarlo, necesito hablar contigo. Necesito explicarte lo que paso.-Dijo Jen tomando más fuerte las manos de Peter entre las suyas.-
-Jen... No es...-
-Sí, lo es. Necesito que sepas lo que paso.-Se mordió el labio.-Cuando desperté y vi lo que me había pasado recordé que Lisi me había tirado, y estaba furiosa... Peter, ¿Cuántos años tenía yo? ¿Lo recuerdas?

 Peter se puso a pensar menos de medio segundo, conocía cada detalle de ella. Sabía que hace poco tiempo había cumplido 18 años, justo como él.

-16, tenías 16...-
-¿Y recuerdas todo lo que hicimos tú y yo a los 16? No me refiero a emocionalmente, me refiero a la parte física.-Peter la miro confuso, sin saber a que quería llegar. Recordaba que ellos habían tenido su primera vez a los 16, pero no sabía en que podía afectar.
-Bueno, yo esa noche iba a decirte algo... Iba a contarte algo que me ponía muy feliz. Teníamos 16 años Peter, y había sido una estupidez, pero yo estaba feliz.
-¿De qué estas hablando Jen? 
-Estaba embarazada, Peter. Embarazada de ti.-
-¿Qué?-
-Iba a decírtelo esa noche, antes de caer, pero lo perdí. Y por eso estaba tan furiosa, tu hermana me había hecho perder a mi bebé, nadie más lo sabía, pero a mi me hacía mucha ilusión. Me asuste, claro, pero mis padres iban a entenderlo, por que te querían, y supe que tu también lo harías. Sin embargo cuando desperté y noté lo que había pasado le conté al doctor de mi estado... Me habían realizado un aborto mientras dormía, por que el bebé había muerto.
 Peter estaba desesperado, con ganas de llorar. Sintió que todo el odio hacía Lisi se acrecentaba cada vez más. Él no tenía la madurez para ser padre, pero eso no quitaba que hubiese sido la persona más feliz del mundo si lo hubiese tenido. Sus padres, los de ambos, los habrían ayudado y serían una familia feliz. Pero Lisi le había quitado eso.

-Por eso no te llamé, estaba desesperaba, y la odiaba Peter... A ella y a ti, bueno, no te odiaba, pero creo que sentía que si te lo decía todo podría haber cambiado. Por que tú estuviste conmigo, pero no del modo en que necesitaba, estuviste como mi novio, pero no sufriste la perdida de nuestro hijo.-

  Jen comenzó a llorar, Peter tomo su cara entre las manos.

-Un día, no sé cuando, pero un día te cansarás de tener hijos míos. Serán hermosos, y testarudos, justo como tú... Y divertidos, y desobedientes, como yo.-A estas alturas él también lloraba, sintiendo como perdía algo que jamás supo que habría podido tener.-Lo juro, Jen. Seremos una gran familia feliz ¿Sabes?
-¿Lo prometes?-
-¿Quieres que lo haga, no confías en mí?-Ella asintió.
-Necesito saber algo, Peter... ¿Hubo alguien más en tu vida? ¿Te enamoraste de alguien en estos dos años?
-Bueno, si te sirve para ponerte celosa, conocí a alguien a quien le fascina angels 121.
-Esa estúpida banda.-Murmuró ella con una sonrisa.-Nunca entenderás que me gustaban más que a ti, pero que jamás lo iba a admitir.-
-¿Y eso?-
-Cuando viniste diciendo "Oh, mira, encontré algo mejor que esos one direction" yo dije "Imposible" y no quería admitir que tenías, en parte, razón. Así que me dedique a criticarlos para fastidiarte...-
-Oh, eso explica mucho, dime que ya no te gustan esos chicos, por favor.-Jen besó sus labios.
-Por supuesto que me gustan, te cambiaría a ti por el pulgar de alguno de ellos.-Peter la beso sonriendo, extrañaba esas tonterías de ella.-
-Tenemos que irnos.-Dijo Jen recordando de pronto que su hermano pequeño se había dormido en el asiento trasero.-Y tú debes volver a casa con esa estúpida chica fan de angels 121.
-Créeme, después de verte nadie logrará tener mi atención.-


                                              * * * * * * * 


 Sinceramente Lali no esperaba que Peter apareciera en la escuela ese día, de los cinco días él asistía como mucho a tres. Y eso si no había exámenes, aún no entendía como había pasado a ultimo año.  

 Angie estaba sentada un poco más atrás, ignorándola completamente. Se sentía sola, por qué siempre se sentaba a su lado. Ahora que ella estaba enojada no estaba muy segura de como se las arreglaría, no conocía a mucha gente más.

-Hola.-Saludo alguien tomando asiento a su lado, ella le sonrío, había visto a esa chica antes pero no estaba segura de su nombre.
-Soy Yami, ya nos habíamos conocido.-
-Oh, claro...-

  El pelo rosado de la chica era lo primero que le había llamado la atención el primer día, y seguía cautivando su atención ahora. 

-¿Te molesta que me siente aquí?-Preguntó.-
-Ese es mi lugar, vete.-Escucho a su lado, Angie esta parada junto a Yami con una mala cara.
-Pero...-
-¡Adios!-Yami se para de mala gana y se aleja de ellas. Angie toma su lugar rápidamente.
-¿Y eso?-
-No quiero que estemos peleadas, a menos hasta que decida que hay una buena razón para ello ¿Quieres contarme?-Su voz sonaba dulce, aunque algo desanimada.
-Ya te lo dije.-
-¿Nada paso entre ustedes, lo juras?
-Lo juro.-Ella asintió.
-De acuerdo, te creo.

Lali. 

  Me abrazó, y creo que hace tiempo que no me sentía tan feliz. A lo mejor aún no me creía, y estaba segura de eso, pero ella me estaba dando otra chance.

-Sé por que Peter no quiere estar contigo. Si vamos a seguir siendo amigas no quiero ocultártelo.-Suelto de repente, al instante me siento mal, no debería haberlo dicho. 
-Dime, por favor.-
-Bueno él... Él esta de nuevo con otra chica, creo que su nombre es Jen.-Ella asintió mordiéndose los labios.
-Jen fue su primer amor...-Me cuenta.-Cuando lo conocí, apenas estaba superándolo, de algún modo creo que lo superamos juntos. Bueno, creía eso.-Suspiro.-Gracias por contarme Lali.
-De nada, Ang.-

  Entonces algo se me ocurrió, si me había costado decirle lo de Jen y Peter, ¿Cómo le diría que me estaba enamorando de él?

Continuará...

 ¿What the fuck? Lali enamorada? Es que adasdasda ¿Desde cuando? Esto no es posible.


 Bueno, este capítulo me costo demasiadoooo, no estaba muy inspirada, you know, así que subo esto solamente para poder avanzar hacía el 16 jajaja... 

 Bueno, hoy vengo con una petición ¿Podrían recomendar la novela a sus amigas laliters lectoras? :3 

Y yo les voy a recomendar algo a ustedes: 
http://novelaslalitermundo.blogspot.com.ar/2014/06/1.html


 Bueno, perdón mil por que el capítulo haya sido tan caca pero bueno, es lo que salió. Mañana prometo capitulon !!! 

 Las veo en los comentarios (¿Les dije que cuando hay muchos comentarios me motivo más?) Las quiero !!

Abby

jueves, 26 de junio de 2014

Capítulo 14

   Peter estaba nervioso, cualquiera podía notarlo incluso si no lo conocía. Sus manos temblaban, y se acomodaba todo el tiempo una vieja camiseta de su banda favorita, respiraba como si el aire no fuera suficiente, con inhalaciones largas. Había tardado cinco minutos en tocar el timbre, se distrajo unos segundos mirando el jardín, tan bien cuidado como siempre estuvieron los jardines de la señora Esposito. Luego se quedo pensando en si sería una buena idea entrar; hace tiempo que no sabía nada de esa familia. Podían estar muy cambiados.

  Finalmente se decidió y tocó el timbre, miraba las rosas que había comprado para asegurarse de que fueran perfectas. Una ramo rojo para Jen, y uno blanco para su madre. Respiro hondo por ultima vez antes de que la puerta se abriera.

  Una melena rubia emergió por la puerta, con una sonrisa picara que indicaba que pensaba hacer una travesura, tenía una cuerda atada en la mano con la que sostenía la puerta, un perro supuso Peter. El niño tenía unos 4 años, y hasta que no hablo Peter no notó que se trataba de su tan amado ahijado.

-¿Shi?-Preguntó imitando una posición de su padre, mientras se apoyaba en el marco de la puerta queriendo parecer grande.
-¡Hola enano!-Saludó Peter. El niño pareció ofenderse.
-Tobi me llamo.-Contestó de mala gana y cerró la puerta en su cara, sonrío a pesar de eso. Volvió a tocar el timbre.
-Nadie.-Grito de nuevo el pequeño.-
-¿Quién Tobi?
-Un chico nadie.-Grito con su voz dulce e inocente, Peter pudo escucharlo estando del otro lado.-

  La puerta volvió a abrirse, y el corazón de Peter comenzó a acelerar, era Jen. Su Jen. Estaba más hermosa que nunca, tenía unos jeans azules y unas vans negras, arriba una camiseta blanca apenas visible bajo su Jersey azul marino, ese que él le había regalado una vez. 

-Hola...-Susurró ella con la voz estrangulada, era evidente que también lo estaba esperando nerviosa, Peter no pudo soportarlo y la abrazo fuertemente.
-Hola, hola, hola.-Tomó su rostro entre sus manos.-Estas tan diferente, tan hermosa.-
-Ha pasado tiempo.-Su voz sonaba dulce, feliz, y pudo ver unas lágrimas en sus ojos. Peter se moría por besarle, pero se vio a sí mismo obligándose a no hacerlo, había pasado tiempo y ellos ya no eran nada.
-Ha pasado mucho tiempo.-Aseguró él.-Demasiado.-Le tendió las rosas rojas.-
-¿Para mí?
-Para quien más serían.-
-No lo sé, ¿Por qué tienes dos ramos?
-Por qué quiero saludar a mi suegra favorita.-Jen sonrío por la palabra utilizada, y lo condujo dentro de la casa. Tobias lo miro con recelo, sentado en la escalera con sus autos de colección, aquellos que todos siempre tenemos en la infancia.-
-¿Qué hace el chico nadie acá?-Pregunto enojado, dejando un auto rojo en medio de la pista.-
-Se llama Peter.-
-¿Qué hace el chico nadie Peter acá?-
-Como habla.-Se vio sorprendido Peter.-Apenas caminaba la ultima vez que lo vi.-
-Habla más de lo que debería.-
-De seguro.-Bromeo Peter.-Hey... El chico nadie tiene un regalo para vos también.-Jen rió al ver como Tobias se abalanzaba hacía él.
-¿Regalo? 
-Bueno, no exactamente.-Saco su billetera.-Tengo esto.-Enseñó un billete de 100.-Y podemos ir a comprar muchos autitos luego ¿Quieres?-Tobias lo miró con desconfianza.-
-¿Y cómo sé?-Pregunta Tobi, Peter le tiende el billete.-
-Guardalo tú.-
-¡Peter!-Lo retó Jen.-¡No hagas eso!-
-Soy su padrino y cumpliré sus caprichos.-Explico, Tobias le sacó la lengua a su hermana.-
-¿Eres mi parino?-Peter rió por el termino usado.-
-Sí, soy tu padrino... ¿Soy un chico nadie ahora?-Tobias negó y lo abrazo.-
-Gracias.-Corrió con sus autitos cantando algo sobre que pronto tendría más. Peter y Jen pasaron a la cocina.

  El pelo de Jen había crecido por los menos 12 centímetros, estaba casi a su cintura, no como la ultima vez que la había visto que lo llevaba por los hombros. Seguía siendo rubio oscuro, como siempre. Así, largo, le gustaba más, podría acariciarlo por más tiempo. Su rostro estaba igual, no usaba mucho maquillaje. Jamás lo había hecho. Tampoco era alta, media cabeza más baja que Peter.  

-¿Y mi mamá?-Preguntó Peter buscando con la mirada a la madre de Jen, a quien siempre había llamado "Mami" Sobre todo cuando ellos peleaban y necesitaba que alguien lo defendiera, solía ser muy gracioso para ella siempre. En realidad, la única que no lo veía divertido era Jen. 
-¡Ma! ¡Tu consentido llegó!-Grito desde la sala, se escucho un grito y muy pronto Claudia apareció desde la cocina, con su delantal y harina en las manos.  
-¡Peter!-Canturreo contenta, abrazandolo. Peter la estrecho también, la había extrañado. Entregó el ramo de flores.-Oh, querido, sigues siendo un encanto.
-Y me sigue gustando el pastel, mami.-Murmuró bromeando.-
-Lo sé, esta en la cocina listo para servir.-Peter corrió hacía allí agarrando a Tobias en el camino.-
-¡Mamá hizo pastel!-Grito entrando.-
-¡Pastel, pastel, pastel!-Canturreo su sobrino.

-Sigue igual.-Murmuró Jen riendo, Claudia suspiro.-
-Sigue siendo un niño inmaduro y caradura, dijo que quería torta antes que hola.-Bromeo.-
-¡Típico!
-Extrañaba verlo por aquí.-
-Vendrá seguido... Solamente espero que él no este con nadie, es decir, ¿Quién sabe que paso en estos dos años?-Murmuró preocupada.-
-Tranquila, es un idiota, pero jamás haría algo para hacerte sufrir.-
-¡Te escuche!-Grito Peter volviendo haciendo malabares, tenía dos platos con pastel en una mano y a Tobias en la otra. Jen le quito uno para ayudarlo, Tobias bajo con su propia porción y corrió.
-Ten.-Quiso entregarle la torta Jen.-
-Era para ti.-
-Oh...-Sonrío.-
-Esperen, oh cielos, ¡Se suponía que ibamos a comer! ¡Y les dí pastel!-Se quejó Claudia.-
-No te preocupes, mamá. Podemos hacer las cosas al revés, nunca fuimos convencionales.-
-Lo sé.-Claudia volvió a abrazarlo.-¡Mírate! Tan grande, tan hombre... Tienes barba.-Señalo tocando su rasurada barbilla.-
-Sí, pero no me gusta. Es rasposa.-Jen rió.-
-Siempre tan... Maduro.-
-¡Hey!-Se quejó Peter.-Yo ser muy maduro.-
-Si, claro, y los cerdos vuelan.-
-Aveces...-Todos lo miraron raro.-Dios, ¿Nunca has visto los simpsons?

 Con ese clima, feliz, alegre, todos se sentaron a la mesa. Claudia había hecho pizzas, aún renegaba por haberles dado el pastel mientras servía la comida en una tabla en medio de la mesa. 

-¿Y mi tan mhh adorable suegro? 

 El padre de Jen jamás lo quiso, y si lo quería no lo decía, siempre se jugaban bromas pesadas. Solían poner bombas apestosas en sus respectivos autos, o arrojar cosas, hacer bromas fuera de lugar o preguntas que nadie quería responder. Como una vez cuando Peter le dijo "Mi madre dice conocerte, ella era la mejor amiga de tu novia, la porrista ¿Es cierto?" Claudia estuvo ofendida con su marido unos días. Tal vez el padre de Jen no lo quería por que Claudia lo defendía todo el tiempo y eso le molestaba. 

  La familia en sí era muy bromista, vivían alegres, y eso era lo que amaba Peter de ese ambiente. 

-Tu adorable suegro dijo que no quería estar cuando llegarás, así que se quedo mirando televisión.-
-¿Película de terror?-Adivino, Claudia le mostró un DVD. Fantasmas y aparaciones, eso estaba mirando.-¿Sería muy malo si me levantara ahora a recordar viejos tiempos con él?-La mirada picara en su rostro hizo que ambas rieran. Jen se levanto con él y lo llevó hacía arriba, el cuarto de su padre estaba al final del pasillo. Caminaron en silencio, deslizándose por la pared. 

-¿De repente? ¿O hacemos ruidos antes?
-De repente.-Sugirió ella.

  Dave, el padre de Jen, estaba por los 45, era un bromista natural, peleador e infantil. Justo igual que Peter cuando llego a esa casa. Tenían personalidades parecidas, y eso hacía que se pelearan tanto.

  Se quedaron detrás de la puerta y justo cuando atinaron a abrir la puerta los sorprendió alguien de atrás, tomando ambos cuellos. Tanto Peter como Jen gritaron del susto, había sido algo inesperado. Una risa bien conocida los alerto, Carlos les había ganado.

-Como siempre, lento Lanzani.-
-Ay, Dave, si que la crisis de los 50 lo ataco, y al parecer la panza de los 50 la acompaña.-
-No me envidies Peter, un día serás todo esto.-Puso cara de asco y luego chocaron sus manos.-
-Aunque sea un viejo cascarrabias e insoportable, lo extrañe.-
-Yo también, no había nadie a quien gritarle lo tonto que era.-
-¿Se quedó sin espejos?-Dave rió. Estaba más ligero que veces anteriores, parecía realmente alegre de verlo.-
-¿Vamos a comer, papá? Mamá hizo pizza.-Contó Jen, sus ojos expresaban que estaba casi tan feliz como ellos. 
-Jamás me perdería una pizza de tu madre.-


  Los tres bajaron juntos, cuando estaban en los últimos escalones los hombres empezaron a pelear por quien empujaba a quien, Tobias los vio y se enojo.

-¡El chico nadie Peter empuja a mi papá!-
-A esta edad estás más para abuelo, Dave.-Peter sabía que le molestaba que lo llamaran por su nombre de pila. Por eso lo hacía, justamente. 

  Se sentaron todos a la mesa, Claudia se molestó por que la pizza estaba fría y tuvo que volver a ponerla en el horno, mientras esperaban todos se sentaron en la mesa a hablar.

-Jen...-El tonó de Dave indico a Peter que se acercaba una bomba.-¿Qué paso con tu novio?
-No tengo novio papá.-
-Por ahora.-Aclaró Peter, ella se sonrojó.-
-¿Cómo no? ¿Y el chico si señor?-Peter rió por el nombre.-
-¡Dios, si lo vieras!-Comentaba Carlos.-Yo le decía algo y agachaba la cabeza diciendo "Si señor H, no señor H, lo siento señor H, nos vemos señor H" ¡Era insoportable!-Peter miró a Jen, no podía decir nada, él también había tenido sus aventuras.
-Sólo salimos una vez, papá. No era mi novio.-
-¿Sabes que pasa, Jen?-Comenzó Peter.-Es la crisis de los 50... Se esta poniendo viejo y las historias se le confunden.-Todos rieron. Dave sonrío, dispuesto a contestar.-
-En primer lugar, 50 tus calzones, y en segundo... ¿Quieres que te cuente de los novios de Jen? ¿De todo lo que paso cuando te fuiste? Puedo hablar.-
-Papá por favor.-
-Claudia... ¿Recuerdas que mi madre era compañera de este tipejo a quien elegiste por esposo? Bueno, hable con ella hoy... Y me contó cosas interesantes.-
-¡Ya esta la pizza!-Interrumpió Dave.-Ve a buscarla Clau, por favor.

 Todos rieron.

-El chico nadie me regalo plata.-Contó Tobias a su papá entrando en la conversación.-
-¿El chico que?-Tobias apuntó a Peter. Dave rió.-El nombre le queda perfecto ¿No es así, chico nadie?
-Así es abuelo.-

  La comida se sucedió entre risas, bromas, chistes y miradas furtivas entre Peter y Jen. Cuando terminaron la pizza Peter le propuso a Jen ir a caminar.

-¿Compraremos mis autitos?-Pregunto Tobias interrumpiendo.-
-¿Puedo llevarlo?-Pregunto a Claudia, ella lo medito.-
-Va a llorar.-
-Por favor mami... Jen viene también, ella lo calmará.-
-Esta bien.-Peter sonrío y beso la mejilla de la mujer.-
-Recuerda, que si decides dejar a este tipo siempre estaré disponible.-Bromeo en voz alta, Jen rió y Dave lo fulmino.-
-No te pases.-
-Lo pensaré.-Contesto Claudia riendo. 
-Bueno, como ahora tengo auto.-Recalco Peter mirando a Carlos.-Iremos a comprar y a tomar un helado, volveremos enseguida.-

  Salieron de la casa, y Peter se animo a tomar la mano de la chica. La cálida bienvenida le hizo olvidar que habían pasado tantos años, todo parecía estar en su lugar, todo volvía a ser como antes. 

-¿Era necesario traer a Tobi?-Preguntó ella riendo.-
-Es mi ahijado, necesito que me quiera y que me deje de decir chico nadie.-
-¿Quieres ser el padrino nadie o el padrino chico nadie?-Pregunto Tobias.-
-Eso no me alienta mucho.-El niño se balanceo con su mano en el aire.-
-Un día tendré un avión y volaré y te llevaré a todos lados ¿Quieres tío nadie?
-¿Tío Peter? ¿No te gusta?
-No... Tío nadie.-

  Jen tomó su mano.

-Tal vez todo podría volver a ser como antes ¿No lo crees?
-Estoy seguro de que estaría feliz de intentarlo.


 Continuará... 


  Holaaa ! :3 Bueno, creo que el capítulo salió largo :D Aquí el encuentro entre Jen y Peter, todos esperaban que fracasara pero adasdadas ¡No fue así! 

   Bueno ,todos quieren que Peter sufra, nunca había logrado que odien a un personaje así jaja...  

  No les gusto la idea de algo fuera de lo laliter, así que vamos a seguir así, yo lo ofrecí no más :3 Además ya no hay tantas novelas laliters como antes (Hay, pero no en tanta cantidad :c) 

 Quería aclarar algo chicas, ustedes me pasaron un montón de links de novelas para que lea pero la verdad es que estoy muuy justa con el tiempo, igual tengo todas guardadas así que apenas pueda me voy a pasar por todas las que pueda, por que me pasaron muchas por acá, muchas por twitter y por face y la verdad es que no me da el tiempo ! Perdón !


   Nos vemos mañana :3 (En realidad, el capítulo 15 ya casi esta, así que nos vemos cuando haya muchos comentarios xD) 


 Abby las quiere !

miércoles, 25 de junio de 2014

Capítulo 13

    Angie y yo habíamos acordado una cita este fin de semana, pero Jen me había hecho olvidar por completo de ella. Que va, me había hecho olvidar del mundo entero. Me senté en la mesa de la computadora, esto tardaría. 


 Angie, tú sabes que te quiero mucho,
pero han pasado algunas cosas... 
Yo no sé si te conviene acercarte a mí,
espero que lo entiendas. Es mejor
que tomemos caminos separados. 


  Envíe el mensaje, y en cuanto el visto llegó la bloquee, estaba haciendo lo correcto. Me había pasado algo hermoso con ella, pero no como con Jen. Jen era el amor de mi vida, y nadie podría cambiar eso jamás. Mi vida no hubiese sido la misma sin ella. 


     -No me dejes.-Suplique, desde aquella cama vacía.-Por favor, Jen, no me dejes.

  -Estoy aquí, mi amor. Nunca te dejaré.


  Aleje los malos recuerdos con un movimiento de la cabeza, estaba bien. Siempre había estado bien cuando ella estaba en mi mente. 

    Mi estomago gruño, así que deje de comportarme como un idiota por unos minutos y baje a buscar comida, encontré en la heladera unas galletas raras, saladas, y comí una para probar. Era horrible.

-Eso es mio.-Gruño alguien detrás de mí, con tono cansado. Volteé y me encontré con Lali apoyada en la pared, en su mano una maleta rosada. Tenía ojeras, parecía cansada, incluso parecía que hubiese llorado.-
-Déjame decirte que son horribles.- 
-Mejor que te lo parezcan, no me gusta compartir.-
-¿Ya te vas?-Pregunte mirando su maleta. Ella asintió.-
-Mis padres me llamaron, llegan en un rato. Quiero ir a limpiar todo, hace una semana que no estoy ahí y la casa no debe verse muy bien.-Recordé lo que había pasado la ultima vez que la dejamos sola. Tal vez ya no podría pasar nada con Lali, pero eso no impedía que seamos amigos. Ella era una persona fantástica, y con un gusto musical uno.-
-¿Quieres que vaya a ayudarte? A lo mejor podríamos... Escuchar angels 123 mientras limpiamos, odio escucharlo solo y nadie más lo aguanta.-Vi un destello en sus ojos, sonrío.
-Bueno... No veo el problema.-
-Iré a cambiarme.-


    En menos de 10 minutos ya estaba de vuelta, ella miraba algo en su celular. En cuanto me vio lo apago y sonrío.

-¿Vamos?-Asentí.-
-Vamos.-Tomé su maleta y la lleve hasta mi auto, eran pocas cuadras pero no tenía ganas de arrastrar nada, y no quería que ella lo hiciera.

   Subió al asiento de copiloto, no se abrocho el cinturón. Por alguna razón todo el mundo me molestaba por no hacerlo, ella apenas lo menciono. No pareció percatarse, al menos no tendría que soportar a alguien hablando hasta que lleguemos de los riesgos de no colocarse el cinturón.
  
  Encendí la radio y comenzó a sonar mi canción favorita Looking for paradise, ella comenzó a cantar casi a la par mía. Era sorprendente las cosas que teníamos en común, y las muchisimas cosas que nos diferenciaban.

-Yo canto para alguien como tú... Pon la oreja nena.-Canté a todo volumen.-
-I singing for somebody like you, somebody like me, baby...-Cantó ella a su vez.

  Cantamos y reímos hasta que llegamos a su casa, bajamos la maleta entre los dos y luego yo la deslice hasta la puerta, el patio de Lali estaba perdiendo color, se notaba que nadie lo había regado en semanas. Ella me vio observandolo.

-Cuando llegamos esto era precioso, se nota que la antigua dueña lo cuidaba bien... Mamá y papá no se dan tiempo para eso.-
-¿Y tú?-Pregunte.-
-Yo no... No sé, nunca se me ocurrió hacerlo yo. No me llevo muy bien con las plantas.-Abrió la puerta y entró dejándome atrás.
-La antigua dueña se encargaba muy bien de esto...-
-¿La conocías?-Preguntó sorprendida, sonreí.-
-Jen vivía aquí.-Su sonrisa se borro rápidamente, cerro la puerta y se arremango mientras tomaba una escoba.-
-Oh.-Simplemente dijo.-Debes tener muchos recuerdos.-
-Sí, pero ahora... Ahora son buenos. ¿Sabes? Volví a hablar con ella, voy a verla este sábado...-
-Se te ve feliz.-
-Sí, lo estoy... Yo realmente la amo.-Miro hacía abajo.-¿Pasa algo?
-Sí... Nadie tuvo nunca esa mirada al hablar de mí.-Se mordió el labio.-Lo siento, son tonterías.-
-Un día alguien te amará así, es imposible no hacerlo.- 

   Su celular sonó, miro extrañada "Creí que lo había apagado" murmuró casi para sí, atendió y su cara cambió completamente.

-¿Angie? ¿Qué sucedió?-
-El altavoz.-Susurré algo desesperado, quería mucho a Angie como para no preocuparme por ella.-
-¡Él no me quiere, Lali! Nunca me quiso.-Caí contra la pared, ella estaba llorando desconsolada. Llorando por mí.-
-Escucha, eso no es así... Lo sabes.-
-¡No me quiere!
-Sí te quiere.-
-¿Y entonces por qué me ilusiono y luego me dijo que no quería nada conmigo? ¡Teníamos una cita y me dejo esperando una hora sola! Y luego se disculpo por un mensaje, y me bloqueo antes de que pudiera enviarlo a pastar con su abuela.-
-No te metas con su abuela.-Intente bromear.-Estará todo bien, no lo necesitas, es un idiota.-

 La miré arqueando una ceja y ella me sacó la lengua. 

-Además, él no es para ti... Encontrarás a alguien.-

  Le saque el teléfono luego de pelear un segundo. Lali me miro enfadada, pero no importaba, solamente necesitaba escuchar que Angie estaba bien.

-Angie, yo te quiero, te quiero mucho pero...-
-¿Peter? ¿Qué haces con Lali?-Me mordí el labio, había sido un error.
-Ella esta con mi hermana, yo no pretendía escuchar pero...-
-Dios, soy una estúpida ¿Esta contigo?-Lali volvió a quitarme el teléfono. 
-No es lo que crees, por favor ¡Diuj!
-Ey...-
-Shh... Angie, por favor, no pienses cualquier cosa. Te diré la verdad, yo soy muy amiga de la hermana de Peter, pero no sabía que era su hermana, y bueno... ¿Sabes que mis padres se fueron de viaje? Me quede con ella unos días, y Peter vino a ayudarme a cargar las maletas, pero ya se va... Eso es todo.-

   Se quedo en silencio unos segundos, pero finalmente volvió a hablar.

-¿Sabes? No quiero volver a escucharte... Creí que podía confiar en ti.-
-Angie, por favor.-
-Adiós.-Lali se sentó en el suelo con los pies.-
-Vete Peter.-
-¿Qué?
-¡Adiós!-Grito fuerte.-¡Ella se enojo por tu culpa! No quiero volver a verte ¡Alejate de mi!

  Continuará... 


 ¡Holaa! Bueno, cero inspiración para este capítulo :c pero el próximo va a estar bueno, es el primer encuentro de Peter y Jen ! :D

 Estoy muy feliz, por que voy a ir a ver a Lali en las vacaciones de invierno !! /(Me hicieron elegir, aliados o Lali, y bueno si iba a aliados iba a ir por Peter, pero la ultima vez fui a verlo a él (A Camila) así que decidí ir a ver a Lali por qué no la veo desde 2012 en el rex) Lo bueno de vivir en Buenos Aires es esto xD

 Bueno, si puedo subo el 14 hoy ♥♥ No prometo nada pero lo voy a intentar, las quiero muchote 


Preguntaaaaaaaaaa: Si estuvieras en los juegos del hambre ¿A quien elegirías como aliados?

Pregunta 2: CON SINCERIDAD Si hiciera este blog de novelas con personajes inventandos, ¿Seguirían leyendo? 

Abii las ama ♥
    

domingo, 22 de junio de 2014

Capítulo 12

 Capítulo dedicado a Miqui Ozan, que siempre me dice cosas lindas por twitter ♥ (Perdón por no contestarte los ultimos dos, los acabo de ver, no entraba a twitter :c )

  Capítulo 11


   Abrí mis ojos, Peter y Lisi estaban sosteniéndome. Mi amiga tenía una cara de espanto que daba risa, pero no podía reír. No podía moverme. Peter no me miraba. Ambos caminaban sin prestarme atención, como si yo no estuviera ahí. No habían notado que yo ya estaba despierta. 

   Había un extraño olor, como a moho, no lo había sentido antes en la casa. Intente moverme para alertar a los chicos de que estaba despierta, pero solamente logre emitir un pequeño quejido, mi cuerpo estaba paralizado casi en su totalidad, inundado por un cosquilleo que recorría desde mis pies hasta mi cabeza. 

-Despertó.-Gruño Peter aún sin mirarme, Lisi sonrío y me vio. Oí el crujido de una puerta y un segundo más tarde estaba recostada.-
-Me has dado un gran susto.-Me retó mi amiga, acomodándome en la cama. Intente moverme, decir algo, pero no podía.-Tranquila, Peter fue a llamar a un médico. ¿Si? Todo estará bien.-
-Lisa.-Grita Peter desde la otra habitación.-
-¿Si?
-¡Qué no se duerma! La enfermera dice que están viniendo, que procures que no se duerma.-
-¿Has oído? No puedes dormir.-

  ¿No podía dormir? Tenía sueño. En realidad, hasta que lo mencione no note que mis ojos querían cerrarse, sin embargo, intente con todas mis fuerzas permanecer despierta. 

 Lo siguiente que sentí fue un pinchazo en mi brazo.

-¡Les dije que no se durmiera!
-Salí un segundo a buscar agua y ya estaba dormida, lo siento.-
-Ella esta bien, ha sido solo un ataque de pánico. Puede que se deba a que no tenían luz, le debe temer a la oscuridad, o a lo mejor era que estaba sola. De todos modos, que se controlé, y si vuelve a suceder que valla al médico ¿De acuerdo?-

  Mientras oía la conversación intentaba abrir mis ojos, me costaba demasiado. Finalmente pude distinguir la figura de Peter sentado a un lado, con su celular y una sonrisa, Lisi frente a mí extremadamente preocupada y una mujer a su lado que supuse sería la enfermera. Era una señora de unos 40 años, alta y con el cabello rojizo sujeto en un moño grueso. Parecía tener demasiado cabello. 

-¡Despertaste!-Susurro Lisi tocando mi frente.-¿Estás bien?-
-Sí.-Susurre.-Estoy mejor.-
-Bueno, es todo, adiós.-Saludo la enfermera saliendo acompañada de un hombre, le entregó un papel a Lisi antes de marcharse. 
-¿Qué paso?
-Parece que has tenido un ataque de pánico.-
-No, yo no tengo eso.-Asegure riendo.-Me abre caído.-

 Mi amiga giro los ojos y acomodo mi almohada, me apoye en mis codos para levantarme. Necesitaba aire.

-¿A donde crees que vas?
-No me quedaré toda la vida en esta cama, Elizabeth.-
-¿Sabes que? Si lo harás.-
-No.-
-Es tu castigo por decirme Elizabeth.-Me retó en tono burlón. 

  Su nombre era Elisa, pero yo la molestaba diciendo que tenía cara de "Elizabeth" ya que la mayoría de la gente le preguntaba si ese era su verdadero nombre cuando la conocían solamente por "Lisi" es decir, vamos, yo también creería que se llama Elizabeth si no se hubiese presentado con su nombre real.

-Quiero ir a caminar, ¿Si? Estaré bien.-

  Mi teléfono sonó en mi bolsillo, tantee para encontrarlo y lo saque de mi bolsillo. Miré el identificador de llamadas: Nicolas.

-Es Nico ¿Puedes atenderlo tú? 
-¿Qué?-Pregunto mi amiga, Peter me miró.-
-Sí, no quiero hablar con él. Pon el altavoz, te diré que decirle.-

 Lisi me obedeció, sonreí. Puso el altavoz y atendió. Hace días que no hablaba con él, y pensaba seguir así. No estaba segura de que sentía, de pronto me parecía muy peligroso. No me importo al principio, pero me importaba ahora.

-¿Lali?-Preguntó cuando Lisi atendió.-
-No, soy su amiga.-
-¿Y ella donde está?-Hice señas para que dijera que dormía.-
-Esta descansado.-
-Oh... Bueno, es que íbamos a salir el sábado, pero no fue... Y no tenía crédito para llamarla antes... ¿Puedes decirle que llame?
-Amm... Claro.-
-Gracias.-Cortó y tiro el teléfono a la cama, puso sus manos en la cintura y me miro. Tomé una almohada y puse cara inocente, ella estaba a punto de darme un sermón.-
-¿Qué fue eso, Esposito? ¿Cómo que lo dejaste plantado?-
-Sí, lo sé, estuvo mal... Pero ese chico está en cosas raras, no quiero...-Miré a Peter.-¿Tú que haces aquí aún?-Pregunté de mal modo, no quería tener nada que ver con ese chico.-
-Resulta que estás en mi cuarto.-Contestó en el mismo tono. Solté instintivamente la almohada y me levante.-
-Iuj, ¿Vamos, Lis?-

  Me levante y ella me siguió, ¿Por qué estaba ahí? ¿Es qué acaso no hay cuatro cuartos más en esa casa? Gruñí para mis adentros.

-Y no vuelvan.-Gritó Peter antes de que saliéramos.-
-Para tu suerte...-Dije mirándolo de arriba a abajo.-Esta tarde llegan mis padres. 

  No sé si iba a extrañar ese lugar, no había sido una semana tan interesante. Me había encantado pasar tiempo con mi amiga, por supuesto, pero... Su hermano era realmente insoportable, y no tenía ganas de volver a verlo nunca más.

-Quizá la próxima vez... Podrías venir a visitarme tú.-Pedí mientras entrabamos a su cuarto, estaba algo mareada pero no dije nada. Tome una almohada y me senté con ella en mi pecho, abrazándola. Lisi se sentó frente a mí tomando un oso de felpa bastante grande. 
-Sí, creo que será lo mejor.-Agacho la mirada.-¿Qué paso entre tú y Peter? ¿O piensas ocultármelo por siempre?-
-Bueno... Nos besamos, pero solamente fue eso.-Ella arqueo una ceja.-
-¿Besaste a mi hermano menor? ¡Diuj!-Me reí ante su expresión espantada.- 
-Eres una idiota.-Reí, recostándome en el respaldo de la cama.-
-¿Besas a mi hermano menor y la idiota soy yo? Oh, tu estás loca querida.-Solté una pequeña risa y tomé mi celular. Tenía dos mensajes de watsapp de Nico. 

  Hey, cuando te despiertes envía un mensaje.

 ¿Me estás evitando? Dímelo y ya no te molestaré. 


  Nicolas me había llamado la atención, me había llamado mucho la atención. Pero él no era para mí y yo no era para él. Era muy peligroso, en cuando descubrí en todas las cosas en que estaba metido quise borrarme por completo de su vida, y estaba segura que eso era lo que haría. No había lugar para gente como él en mi vida.

 Lo siento, creo que debemos ver a otras personas.

 No recibí respuesta, pero sabía que él lo había visto. Estaba bien, no quería respuesta. Quería que dejará de insistir.  

-¿Estás bien?-Preguntó Lisi.-
-Si, claro...-Suspiré.-Tengo hambre, ¿Comemos algo?
-Sí, mamá esta haciendo la cena. Ella estaba preocupada por ti, es mejor que le digamos que todo está bien.-
-¿Ella lo sabía?-Cuestione espantada, no quería asustar a la mujer que me dio alojo en su casa.-
-Sí, hablo con la doctora. Estaba realmente preocupada. Pero no te preocupes... Ya está tranquila.

 * * * *

 Peter.

  Tomé mi teléfono y envíe un mensaje a Jen, últimamente hablábamos mucho y eso me encantaba. La había necesitado demasiado. 


          Peter:   ¿Cómo estás?

 Jen: Te extraño.

Peter: También yo... Estoy esperando que 
llegue el sábado.

Jen: ¿Qué tal si nos vemos antes? 

Peter: ¿Cómo cuando? 

Jen: Mañana, durante la hora de clases. ¿O ya
no te gusta escaparte conmigo?

Peter: Siempre fue mi parte favorita
de las clases.

  De alguna extraña manera, ella lograba devolverme la alegría. Ella lograba que me olvide de todo a mi alrededor.

 Mi computadora sonó, indicando que tenía un mensaje en facebook. Me levante de la cama, aun con la vista fija en el teléfono y abrí el mensaje. Era Angie.

 Dios, me había olvidado por completo de mi cita con Angie.

 Continuará... 


 Peter es un malvado rompecorazones :c Angie, Lali, Cathe, deja a todas mal. Aveces me dan ganas de ser un personaje y darle una lección... Oh, esperen, yo escribo, podría darle una lección :O Dios, la vida es rara.

 ¿Les gusto el nuevo diseño? :3 A mi me encanto así mucho adadsadsa. Aunque sus opiniones son las que cuentan, comenten. :3 

 ¿Y les gusto el capítulo? :3 Bueno, sé que no pasa nada bueno todavía... Esperen ¡Lali dejó a Nico! Algo bueno... /Aunque ustedes querían que siguieran, LOL/ 

 Bueno, soy cruel B| 

 Nos vemos mañana :3 (Sii, mañana de nuevo :D Estoy haciendome mucho tiempo y eso me encanta) 

Abby las ama ♥

Preguntaaaaaaaaaaaaaaaaa: (La que ya hice) ¿Les gustó el diseño?

PD: CAMBÍE MI USER !!! Ahora soy: @amagicplace_ (Significa un lugar mágico :3)

sábado, 21 de junio de 2014

Capítulo 11

 Suspiré e intente calmarme, mi corazón latía fuertemente y no podía creer aún que estaba hablando con la mujer que ocupaba mis pensamientos cada día.

-Hola Peter.-La oí decir, intente tranquilizarme, pero mis manos aún temblaban.
-Mi amor...-Se me escapo, oí una risa de ella, una de esas tímidas que le salían cuando se ponía nerviosa. Dios mio, ella estaba nerviosa.
-Oí que mamá te invito a venir.-
-Sí.-
-Pues me encantaría que vinieras... ¿Qué tal este sábado?-Una sonrisa demasiado grande se instalo en mi rostro, y estaba seguro de que mis ojos brillaran. Ella me hacía tan estúpido.
-Por supuesto.-Mordí mi labio, jamás lo había esperado.-Tú no ¿No estás molesta conmigo?-Me animo a cuestionar, sé que nuestro pasado es algo tormentoso, y tengo miedo de que la situación sea incomoda si ella a sentir algo de rencor por mi aún.-
-Culparte fue estúpido, fue un accidente, y en todo caso debería estar enojada con Lisi no contigo... No he dejado de pensar en ti, Peter.
-Tampoco yo.-
-Tengo que cocinar ahora, pero... Puedo llamarte más tarde, si quieres.
-Claro, este es mi número así que supongo que quedará guardado.-
-Por supuesto, adiós Peter.-Cortó. 

  Me quede mirando el teléfono unos instantes, la voz de ella aún inundaba mis oídos. No había cambiado, seguía siendo dulce y melodiosa. 

  El camino a casa lo atravesé con una gran sonrisa, hace años que yo no me sentía tan bien. Hace años que no me sentía tan lleno, tan feliz. 

   Subí directamente a mi cuarto, las escaleras parecían más fáciles de cruzar, o tal vez era que las había atravesado de dos en dos. Por primera vez no sentía que me faltara energía, al contrario. 

   En cuanto hube llegando a mi cuarto atine a abrir la puerta, pero un grito mortífero llego a mis oídos: Estaba en problemas, sin dudas.

-¡Juan Pedro Lanzani!-Grito mi hermana cruzada de brazos, en este momento, no me importaba. Ni siquiera mi odio hacía ella parecía tan fuerte en estos momentos, incluso podría abrazarla. Pero no un abrazo ficticio, un abrazo real. 
-¿Sabes? Te quiero mucho hermanita.-Dije para intentar zafar del monólogo que se aproximaba. 
-¡No me vengas con sandeces! ¿Quién te crees para gritarle a Lali?-

 Lali había desaparecido totalmente de mi sistema, ni siquiera recordaba por qué le había gritado. Mi trabajo allí estaba terminado: Jen volvería. 

-¿Quién te crees para contarle mis cosas?-Ella se mordió el labio inferior, sin saber que decir. Sonreí con suficiencia y entre a mi cuarto, encendiendo un cigarrillo mientras me sentaba frente al computador. 

 Entre a facebook, tenía un mensaje de Lali. A regañadientes lo leí, solamente para ponerle punto final al asunto. 

Hola Peter, solamente quería decirte que 
no pretendía ser grosera hoy, y tal vez tú tampoco.
No sabía que Jennifer era algo tan importante para ti,
al menos no creí que ahora lo fuera. Noto que estaba equivocada.

 No espero que me perdones, solamente quería hacerte saber que
entiendo tu enojo, y que entenderé si no vuelves a hablarme.


   Lo primero que cruzo por mi mente fue que Lali escribía muy elegantemente, demasiado para su edad. Suspiré y conteste .

 No te preocupes, no tenias que saberlo. 
Igual prefiero que todo termine acá.


  La cuestión terminó allí, apague el monitor y me recosté en la cama. No necesitaba más para ser feliz, no había problemas ahora. Solamente la ilusión de que el fin de semana llegara rápido. 

   Se suponía que esa semana iba a ser exclusivamente mi semana de conquista, Lali debería dejar a Nico por mí, y luego, cuando yo estuviese satisfecho ella debería buscar otro partido. Era una idea genial: La alejaría de Nico, que era malo para ella o cualquier persona decente, y mis necesidades estarían cubiertas. Sin embargo ahora, no quería saber nada más con nadie. Nada con nadie que no fuera Jen. 

 * * *


 Lali. 


   La cama de mi amiga se sentía incomoda, o tal vez era el hecho de estar acostumbrada a una extravagante comodidad. Apoye mi cabeza en la almohada roja y floreada mientras sostenía un peluche en mis brazas, estaba sentada con mis rodillas al pecho, intentando acomodar mis pensamientos. Nicolas había llamado pero yo no atendí, mis pensamientos estaban un poco más allá del cuarto de Lisa. 

  Ella dormía cómodamente junto a mí, su cama era de dos plazas, con lugar suficiente como para que ambas tuviéramos suficiente espacio. La mire, ella y Peter no se parecían mucho, Lisa tenía mejillas regordetas, era alta y tenía los ojos azules más oscuros que había visto. Ahora, mientras la veía dormir, pude notar sus largas pestañas. Ella era una chica muy bonita, aveces estar con ella me hacía cuestionar mi propio cuerpo. 

 Tomé mi celular de la mesa de luz y puse mi canción favorita Looking for paradise. Sabía que a Peter también le gustaba, pero me negaba rotundamente a pensar en él. Era un patán. Me había jurado que jamás dejaría que nadie me gritara, por que no quería acabar como mi madre: Golpeada hasta sangrar.

 Peter Lanzani estaba fuera de mi sistema. Podría tratarlo amablemente, podría ser políticamente correcta con él. Pero jamás me arriesgaría a tener un sentimiento hacía él que no fuera el que siente cualquier chica por el hermano de una amiga. Después de todo, él jamás había expresado sentir algo por mí. 

 Y si, nos habíamos besado, y sí, había sido mágico. Pero eso no significaba que a él le hubiese importado algo.

  Me recosté mientras los últimos versos de Looking for paradise sonaban, me obligue a dormirme. Mañana sería un largo día. 


  La lluvia me altero cuando desperté, no solo era lluvia, era una tormenta. Levante mi reloj y noté que hace dos horas que debería estar en el colegio. Me alarme, pase una mano por mis ojos por que comenzaba a marearme. Siempre me pasaba cuando levantaba mi cabeza rápido, usualmente no podía ver por unos tres o cuatro segundos. El médico decía que era algo totalmente normal.

 Miré a mi lado: Lisa no estaba. Si se había ido y no me había despertado iba a matarlo. 

   Fui en busca de mi bolso y me vestí, me puse un jean bastante holgado y una camiseta de angels 121 que había mandado a hacer, sobre ella me coloque un jersey de lana color blanco, con una cruz en color azul. Mis vans multicolores estaban debajo de la cama, me las puse rápido y finalmente ate mi cabello en un moño.

 Salí del cuarto y camine por el pasillo, estaba a oscuras a causa de la tormenta. Al parecer no había luz, me daba algo de miedo así que acelere el paso. No pude llegar a las escaleras, todo estaba demasiado oscuro.

 Mi respiración comenzó a dificultarse, cada vez más rápida. Me aferre una pared, sentía como si algo fuera a agarrarme, y eso solamente acelero más mi respiración. No podía moverme, y lo único que sentía eran dos pares de brazos sosteniéndome. 


 Continuará... 


 Holaaaaaaaa ! 2 día consecutivo que subo (Y ya voy a empezar a escribir capítulo para mañana) ¿Cómo están presiosuras? Yo algo aturdida, todos están mirando el partido pero yo estoy castigada (No diré los motivos, pero no hice nada, los adultos son injustos) Así que mientras todo gritan el gol yo estoy escribiendo n.n Al menos no me quitan mi compu.

 Estoy leyendo Harry Potter así que las dejo rápido :3 Beshitos .


 Abby las ama !!! :D


Gracias por todos los comentarios ayer, me motivaron mucho para escribir el capítulo de hoy, si también hay muchos comentarios voy a subir más :3 

viernes, 20 de junio de 2014

Capítulo 10

  La observe durante unos segundos sin saber que decir,  nadie antes me había hablado de Jen. Todo el mundo evitaba el tema, todo el mundo quería creer que ella jamás había existido, nadie se había animado a decirme que sabía lo que había sucedido. 

 Me pare y fui hacía la computadora, no estaba listo para hablar de Jen, y mucho menos con ella.

-Lo siento.-Susurra Lali, no conteste.-Peter...-
-Es mejor que te vayas.-Corté, no me agradaba que la gente se entrometiera en mi vida, Lali me miro unos segundos y luego se fue.-
-Peter.-Volvió a susurrar con sus ojos húmedos.-
-Vete dije, no quiero que vuelvas aquí.-Suspire y gire, pero note que aún no se había ido.-¡Joder! ¿Eres sorda mujer? ¡Qué te marches! 


 Lali corrió fuera del cuarto con cara de asustada, hundí mi cabeza entre mis brazos. Pensar en Jen jamás me hacía bien, pensar en ella siempre terminaba dañándome. 

  * * * * * * * * *  


  El sol de la tarde comenzaba a desaparecer, las cortinas de mi cuarto estaban corridas hacía un lado dándome la vista perfecta del casi nocturno cielo. Mi habitación estaba desordenada, había papeles junto a la puerta, ropa en la cama que estaba contra la pared y muchas inutilidades en la mesa de la computadora. Había libros e historietas que jamás iba a leer desparramados por todos lados, y entonces comprendí que había tenido un ataque de rabia. 

 Usualmente no lo notaba mientras sucedía, pero mi colección de libros e historietas jamás tocadas solamente estaban en el suelo cuando se me ocurría tirar todo hacía todos lados, no recordaba en que momento había sucedido, pero tampoco sabía en que momento había oscurecido, así que no era una situación única. En realidad me pasaba seguido, me pasaba cuando alguien mencionaba a Jen o ella venía a mi mente. 

  Salí de la casa dispuesto a dar un paseo, el aire frío de otoño ataco mi rostro, en especial mis oídos, que era lo más descubierto que tenía. Llevaba puesto un jean desajustado, una camisa azul de angels 121 debajo de una chaqueta grande de cuero, que era bastante abrigada. Decidí no tomar ni la moto ni el coche, necesitaba que mis piernas se movieran al menos un poco.

  Comencé a caminar, el vecindario se veía vacío. Era un lugar tranquilo mayormente, excepto por la esquina frente a la cancha, donde mis amigos intercambiaban "Productos". Aveces quisiera decir que no los conocía, que mi vida no estaba ligada a la de esas personas. 

  Me pare frente a la que había sido la casa de mi novia, donde ahora vivía Lali. Me pregunte si ellas se habrían conocido durante la mudanza o el proceso de venta. Sin dudas no eran personas parecidas, pero creo que podrían haber sido amigas. 

  Me senté frente a la casa, tratando de recordar todos los momentos que habíamos vivido juntos, todo lo que ella me había cambiado. Tratando de recordar la persona que yo era cuando ella estaba conmigo. 

 Tome mi celular y busque el número de su madre, la amaba Nilda, quien me adoraba, o al menos lo había hecho cuando era mi suegra. Había hablado algunas veces con ella hace un año, me contaba como avanzaba Jen y que era de su vida, el día en que me dijo que había llevado un chico a casa simplemente no pude volver a llamar. No estaba segura de que él fuera su novio, pero yo si lo estaba. Jen no tenía amigos varones y ambos lo sabíamos. 

 Observe su número varias veces antes de animarme a cliquear en el botón verde. Los nervios se apoderaron de mí, hace tiempo que no hablaba con alguien de esa familia, hace tiempo que no sabía de mi chica. Por que ella, aunque pasara el tiempo, siempre sería mi chica.

-Hola.-Escucho al otro lado, una sonrisa se escapa de mis labios.-
-Hola Nilda ¿Cómo está?-Pregunto respetuoso, miro una vez la casa y me imagino que ella esta ahí, que nada a cambiado, que voy a avisarle que entraré a visitarlos y quizá me quede a comer.-
-¿Peter? ¿Eres tú? 
-Claro ¿O esperaba que algún nuevo yerno la llame? Créame que molestaría, quiero ser el único que tenga el placer de decirle suegra.-Bromeo, ella es como una madre para mi, estuvo para mi incluso cuando todos me dieron la espalda. Escuche una risita de su parte.-
-Aún eres encantador, creí que te habías olvidado de tu querida suegra. ¿Llamas para saber de Jen?
-En realidad, llamaba para saludar a la familia. A usted, a Carlos, y por supuesto me gustaría saber como siguen Jen y Toby.

 Tobias era el hermano menor de Jen, había nacido cuando yo aún era novio de ella, le había tomado mucho cariño. Incluso me habían nombrado su padrino, título que supuse perdido en cuanto se marcharon.

-Nunca habías preguntado por Tobias.-
-Mi error.-Suspire alejándome de la casa luego de echar una ultima ojeada. 
-Pues, tu ahijado sigue creciendo feliz.-
-¿No han cambiado de padrino?
-¿De qué hablas? Tú lo bautizaste ¿Recuerdas? A menos que ya no quieras serlo.
-Para mi es un placer, sabe que lo quiero mucho. Pero creí...
-Creíste mal, deberías venir a verlo.-
-¿Lo dice en serio?-Pregunto emocionado, hacer una visita a esa feliz sería sin dudas algo perfecto.
-Por supuesto. Sabes, el otro día hable con Jen sobre ti... Dijo que le gustaría volver a verte, sabe que nada de lo que sucedió fue tu culpa. Sin embargo se rehúsa a saber de Lisi.
-No es la única.-Grazne, pero no pareció escucharme.  En mi cabeza seguían sus palabras "Le gustaría volver a verte"
-Quizá podría tener su número...-Fue más una pregunta que una afirmación, una arriesgada pregunta de la cual no esperaba obtener mucho. Ella suspiro.
-Espera un segundo.-

 La linea quedo en silencio, tantee mi bolsillo y saque un cigarrillo del bolsillo derecho de la chaqueta, lo encendí y me lo lleve a los labios. Había decidido reemplazar las drogas por el cigarrillo, para tener algo a lo que aferrarme que no me hiciera tanto daño. 

-Hola.-Escucho al otro lado, y el cigarrillo casi cae de mis labios. Esa voz... Esa era su voz.
-¿Jen?-Pregunto con la voz entrecortada, 
-Hola Peter...-

  Continuará... 


 Dios, él... ¡Esta hablando (O por hablar) Con Jen! Después de tanto tiempo :´) Laliter no me maten xD 


  Bueno, digamos que no tomo muy bien que Lali lo supiera, o que Lali se lo dijera. 

 Quería aclararles que no subía por que no sabía que como seguirla, y por que estuve leyendo para tratar de mejorar un poquito más. (Osea, estuve leyendo un libro con una muy buena narrativa y estoy tratando de sacar ideas de como escribir.) Así que van a tener situaciones con más descripciones y eso... Seguramente en el próximo capítulo por que hoy lo escribí rápidito.

 Si hay muchos comentarios subo otro, estoy con muchas ganas de escribir.


Abby Las ama.

Preguntaaaaaaaaaa: ¿Alguien vio o va a ir a ver "Bajo la misma estrella"? Yo leí el libro hace un año y vi la peli hace una semana, es preciosa :´)