Epílogo

Epílogo {Give me a Chance}

{Lali}

[5 meses después]

Sonreí feliz al ver a lo que ahora era mi familia, la familia más perfecta que alguien podría tener. Martin, Peter y yo.

Unas manos me rodearon por atrás y sonreí feliz al saber que era Peter, mi marido.

— ¿Cómo anda la esposa más bella? —susurró mordisqueando mi cuello juguetonamente.

— ¿Hoy te levantaste alegre? —pregunte sin apartar la mirada de Martín, que se encontraba en el pequeño columpio situado en el medio del patio trasero.

—Siempre estoy alegre.

—Eso es asqueroso, papi —grito Martin al tiempo que nos daba la espalda. No pude contener una carcajada mientras que Peter me lanzaba una mirada amenazadora.

—Preciosa, guarda esa energía para esa noche, cuando estés en nuestra cama, rogándome por más. —Su tono de voz era burlón pero distinguí el toque de sinceridad que había en aquella oración.

Al ver que Martin estaba entretenido con otra cosa y nos estaba dando la espalda, decidí aprovechar la situación.

Comencé a picotearle los labios y Peter gruño.

—¿Y qué pasa si no quiero? —lo obligue a retroceder hasta quedar tras la pared, fuera del campo de visión de Martin.

—Si vas a querer… —susurró confiado. Casi me atragante con mi propia risa.

—Necesito tomar una ducha, estoy toda pegajosa —objete intentando cambiar de tema. Me retorcí como una gata en celo en los brazos de mi marido, intentando zafarme de su agarre.

—Yo te acompaño, amor. Debemos ahorrar agua. —Me guiño un ojo. Este era el Peter al cual yo amaba, el divertido, confiado y pervertido. Este era mi marido.

—Quiero un bebé —, dije de pronto agarrándolo por sorpresa. Realmente era una idea que me venía rondando por la cabeza hace varios meses, pero no quería apurar las cosas. Sentía la necesidad de estar segura de que Peter, al igual que yo, quisiera tener un hijo.

La sonrisa un su rostro se amplio y la felicidad comenzó a burbujear en mi interior.

—Perfecto, porque yo también lo quiero. Es lo que más quiero en este momento: tener un hijo con vos.

Lo atrape en un abrazo, siendo incapaz de hablar.

—Si es nena quiero que se llame Zoe —el solo hecho de imaginarme un hijo de él y mío hizo que mi cuerpo comenzara a temblar de alegría.

—Ni hablar, se llamara Ashley.

— ¿Por qué no me acompañas a ducharme? Así comenzamos con los preliminares de esta noche— murmure. Él asintió entusiasmado como un niño pequeño.

Al fin tenía todo lo que quería; la vida que siempre había anhelado. 

_________________-

Ahora si es el final definitivoD: Se que fue un poco corta la nove, pero no tenía tanta imaginación y si la alargaba tardaría banda en subirles:c Anoche tuve mi fiesta de licenciatura de los estudios basicos (si, así se llama donde yo vivoxD) volvi super cansada, por lo que llegue y me acoste a dormir, ah:c Hoy me levante a las 2:30 y me puse a escribir para subirles:3

PREEGUNTA: tengo una nueva nove, ¿les interesaria un tema de la droga y el alcohol? Es algo que nunca se había subido al blog y me parecio interesante hacer una nove de eso. ¿Ustedes se coparian? 

¡¿QUÉ LES PARECIO EL FINAL?! Lo cambie como tres veces, minimo xD Besosc:

Yami

Capítulo 11

Capítulo 11 {Give me a Chance}

{Lali}

Peter acariciaba suavemente mi hombro mientras yo intentaba taparme con las sábanas todo lo que me era posible. Mis mejillas se sonrojaron al recordar lo sucedido y escondí mi cabeza en la línea de su cuello.

—Bonita, ¿qué te pasa? —pregunto delicadamente intentándome sacar de mi “escondite” — ¿Sabes? Te voy a confesar algo: lo que primero me llamo la atención de ti es cuan malditamente inocente eres, eso te hace más hermosa, si eso es humanamente posible.

Lentamente comencé a subir mi cabeza para quedar a la altura de su rostro y mirarlo directamente a los ojos.

—Gracias por ayudarme, a tu manera, pero ayudarme al fin —dije con una sonrisa impresa en mi rostro mientras comenzaba a acariciarle las mejillas, mentón, para depositarle un suave beso justo en el punto del pulso—. Eres hermoso… y como amante aún mejor —, le susurré mordisqueándole el lóbulo de la oreja. Él gruñó y se tomo unos segundos para tranquilizarse. Me agarro de las caderas para que no me moviera y quede a horcajadas sobre él.

—Eres hermosa… —hablo mientras delineaba el contorno de mi cadera —. Pero debemos aclarar un par de cosas, ¿no crees? Supongo que tienes muchas dudas, puedes preguntarme lo que se te venga a la cabeza.

—Cuéntame más sobre Angie; por qué ella te pidió que me enamoraras y eso.

—Ella estaba muy preocupada por ti. Desde lo que paso con Pablo, no salías, no querías conocer a gente nueva, y empezó a querer hacerte de amistades. Cuando supo que yo estaba de vuelta en Argentina, pensó que sería una buena idea que te relacionaras conmigo, para que volvieras a creer en el amor. Pero, lo que ninguno de los dos pensó, es que volverías a creer en el amor, pero cuando me volviera a Italia sufrirías otra vez.

Me removí incomoda, intentando acostarme a su lado; la realidad me había caído como un balde de agua fría.

— ¿Tu… tú debes volver a Italia? —pregunte con el corazón en un puño

—Sí, tenía planeado hacerlo, pero no lo voy a hacer. Me quiero quedar aquí contigo, quiero tener planes a futuro juntos.

Mis ojos brillaron con anticipada emoción y me tire encima de él, literalmente, riendo como loca y soltando algunas lágrimas de alegría.

—Gracias… por aparecer en mi vida —susurre sinceramente.

Su mano comenzó a moverse a lo largo de mi espalda, tranquilizadoramente, mientras me susurraba cosas tiernas al oído y besaba mi coronilla. Mis pechos estaban aplastados contra su torso desnudo, y yo estaba muy consciente de aquella situación.

— ¿Me das una oportunidad para que me ames, preciosa?

—Tienes la cantidad de oportunidades que desees, Peter—. Mi corazón dio una voltereta feliz y yo supe que este era un nuevo comienzo. Ahora si podría ser feliz.

— ¿No te importa que te haya mentido? ¿Y Martin?  —Preguntó con preocupación brillando en sus ojos—. Porque, como ya sabes, yo lo tengo a Martín. ¿No te importaría andar con alguien que ya es padre?

Solté una carcajada por cuan estúpido sonaba eso.

—No me importa que me mentiste, porque lo hiciste por algo que creíste justo. Pero de aquí en más no quiero ni una sola mentira, ¿de acuerdo? Siempre con la verdad—. Peter asintió rápidamente con la cabeza y yo le bese la punta de la nariz—, y Martin es hermoso, lo quiero muchísimo y no me importa que tengas un hijo. ¿Cómo alguien podría no querer a Martin? Supongo que nos llevaremos muy bien con tu pequeño —, repentina emoción burbujeaba adentro de mi cuerpo —pero… ¿qué pasa si Martin no me acepta? ¿Y si no me quiere? —Dije aterrada de que eso sucediera.

—Martin ya te adora, y más te va a adorar cuando seas mi novia, porque algún día vas a ser mi novia, preciosa. Y no falta mucho para eso—, me guiño un ojo divertidamente.

—Vamos de a poco. Ahora, ¿me puedes volver a besar?

Peter comenzó a depositar pequeños besos húmedos por mi rostro, en el valle de mis pechos y a lo largo de mi vientre.

— ¿Te dije que sabes riquísimo? —murmuro repentinamente al tiempo que me daba vuelta para que quede debajo de él, tenía todo su peso apoyado en sus codos para no aplastarme. Una de sus manos se dirigió a mis muslos, mientras la otra rasgaba el papel de metal que se encontraba sobre la mesita. Arañe su espalda y un gemido salió de la parte posterior de mi garganta. Él me beso dulcemente mientras aceleraba el ritmo de sus envestidas.

—Tendremos un final feliz, lo prometo—, dijo cayendo exhausto y sudoroso sobre mí —Martín, nuestros hijos, tu y yo.

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No firmaron mucho pero no estaba segura de que podría subir el capítulo más tarde, asique me asegure:D ¡ÚLTIMO CAPÍTULO! Ahora solo falta el Epílogo, si firman mucho se los subo por la tarde o madrugada, de lo contrario será mañana :c 

Yami  

Capítulo 10.

Capítulo 10 {Give me a Chance}

{Peter}

—Yo… vine a Argentina para olvida a Camile, la madre de Martin. Cuando llegue me encontré a Angie, ella es una vieja amiga, y me propuso un trabajo. Yo debía de enamorarte y hacer que le dejes de tenerle miedo a los hombres, luego si quería me podía volver a Italia.

Los ojos de Lali se agrandaron y el labio inferior le comenzó a temblar.

—Ustedes me mintieron —. Susurró retorciendo el vestido con sus manos.

Me acuclille frente a ella y suavemente le aparte las manos del vestido.

—Sí, hicimos algo mal, pero por las razones correctas. Tú pensaste que no podrías amar a nadie más después de lo que te hizo Pablo, y Angie estaba desesperada por ti, por ayudarte. Yo no te conocía, creí que estaba haciendo lo correcto, que te estaba ayudando. Pero luego me di cuenta que no fue así, que yo solo te volvería a romper el corazón…

—Vos no sos psicólogo, ¿verdad?

—Sí, esa fue la única cosa en la que no te mentí. En Italia ejercía la profesión de psicólogo, y aquí creímos que sería una buena forma de conocerte, de saber lo que pensabas.

—Yo… yo me quiero ir, por favor.

—Lali, por favor, dime algo… lo que quieras. Enójate, grítame, pégame, lo que quieras, pero no te vayas.

— ¿Qué es lo que sientes por mi? Di la verdad, no pienses en lo que lo pudiste haber prometido a Angie ni en nada más.

Extrañamente su pregunta parecía fuera de lugar después de todo lo que yo le había contado. ¿Qué era realmente lo qué yo sentía por ella?

—Cuando te conocí fue muy raro —, comencé— por un lado pensé en decirle a Angs que quería rechazar su propuesta, pero, por el otro, sabía que si rechazaba no te volvería a ver más; y yo lo que más quería era volver a verte. Luego fueron pasando los días, y me encontraba pensando más seguido en nosotros. No logro saber muy bien lo que siento… no te puedo decir que estoy enamorado porque te conozco hace poco, pero estoy muy seguro que, si me das tiempo, me enamoraría fácilmente de ti.  ¿A qué se debe la pregunta?

Empecé a analizar lo último que había dicho y rogaba silenciosamente por no haber hablado de más.

—Estos últimos días quería verte siempre. Me encanta la forma en que cuidas a Martin y lo cariñoso que sos con él.

Y sin decir más, junto sus labios con los míos en un apasionado beso. Me costó un par de minutos responderle, estaba anonadado. No entendía como me estaba besando luego de lo que le conté. Con mi lengua delinee el contorno de su boca, pidiendo acceso, a lo que ella accedió gustosa. Su sabor exploto en mi boca y yo me sentí desfallecer. Mis manos se dirigieron a su cadera instantáneamente. Mi erección comenzó a crecer rápidamente, avergonzado, intente moverme para ocultarle aquello, aunque no lo logre. Ella se rio y acaricio mi nuca, poniéndome la piel de gallina.

—¿Tu amigo esta… alegre? —preguntó pícaramente, mientras comenzaba a descender sus manos por mis jeans.

Este es un juego que se puede jugar de a dos… 

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¡Oh my good! Aún falta un capítulo, donde aclararan las cosas y todo eso:3 ¿Se nos pusieron calentones nuestros protagonistas? Ah, las hormonas se les subieron a la cabeza(? Esta Lali es todo una loquilla xD 

Perdón Chari por subir recien, es que acabo de terminarloD: Donde yo vivo son las 2:33 exactamentexD ¿QUIEREN EL ÚLTIMO CAPÍTULO? Ya lo tengo terminado:3 ¡Firmen mucho y mañana cuando me levanto se los subo! Ahora solo me falta escribir el epílogo... 

Yami

Capítulo 9.

Capítulo 9 {Give me a Chance}

{Peter}

Desordene una vez más mi cabello mirándome en el espejo de cuerpo completo que tenía en frente de mí. No quería que tuviera la impresión de que me había estado arreglando por horas, pero tampoco de que no me importaba nada que viniera a casa. Por Dios, esto era más difícil de lo que yo esperaba.

Según mi reloj Lali tendría que estar aquí en menos de diez minutos. ¿Y qué pasa si se enoja por la mentira que le dijo Angie para que venga? ¿Si no me da la oportunidad de hablar? Me obligue a tranquilizarme y bloquear mi cerebro para que no tenga esos pensamientos en este momento.

¿Si actúo como un completo idiota? Más idiota de lo que vengo siendo hasta ahora es imposible…

Lali, yo te mentí. Angie me contrato para que te enamoraras y luego, cuando mi trabajo estuviera hecho, regresara a Italia.

Ni en cien jodidos años podía empezar a contarle toda la verdad de esa manera, ella se asustaría como los mil demonios, y no es que la culpe.  Esto estaba mal de todas las maneras en las que podría estar mal.

El estrepitoso ruido del timbre logro sacarme de mis pensamientos.

Allí estaba ella. Enfundada en un hermoso vestido de seda y zapatos de tacón a juego. Tenía un poco de gloss labial, y sombra esparcida muy sutilmente por sus ojos. Tenía las mejillas de color escarlata, no podía ser más inocente de lo que era. Una sensación de posesión se hincó en mi pecho y retumbo en mis oídos.

—Hola —.Dijo ella tímidamente al tiempo que entraba en el departamento.

—Lali, es… estas hermosa.

Después de cenar y hablar un rato me entere que Angie le había dicho que íbamos a tener una cita para cuatro, porque no quería estar a solas conmigo. Era un maldito genio mintiendo.

Supuse que ya era hora de empezar a contarle la verdad y rogar porque me entendiera, de lo contrario volvería a Italia.

—Yo… te tengo que contar algo. Por favor, no me interrumpas, ¿sí? Es que es algo complicado lo que te tengo que decir. 

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¡AÚN NO SE SI FALTA UN CAPÍTULO O DOS!xD Peero, creo que solo falta uno. Agh, ¿qué dicen que pasará? Ya tengo la próxima nove que subirec: Firmen y en la madrugada tienen los/el capítulo que falta más el Epílogo, ¿si? 

Capítulo 8

Capítulo 8 {Give me a Chance}

{Peter}

La cara de Angie estaba pálida y eso no ayudaba  a que me tranquilizara.

—Peter, yo… perdón— dijo resignada— cuando te llame para que me ayudaras no pensé que podrías sentir algo por ella, y ahora… tú estás metido en este lio.

—Y cuando yo acepte ayudarte tampoco sabía que comenzaría a sentir algo por Lali. No es tu culpa, Angs— trate de reconfortarla. Su nariz estaba roja, lo que significaba que se estaba conteniendo para no llorar.

—¿Por qué no le dices la verdad? Si quieres yo podría hablar con ella y explicarle lo que sucedió. No tienes la culpa de nada y estoy segura que te va a perdonar.

Yo no estaba tan seguro de que me perdonaría…

—Es mi paciente no puedo sentir algo por ella. Además, en un mes ya debo volverme a Italia con Martin.

—Amor, solo es amor. Cálmate y piénsalo bien. ¿Estás seguro que la amas?

—Más seguro que nunca en mi vida. Y sentir lo que siento por ella me asusta muchísimo. Yo creí que estaba enamorado de Camile, pero ahora me doy cuenta que no es así, jamás sentí lo que siento por Lali. Cuando lo veo parezco un adolescente de dieciséis años en su primera cita. Me pone nervioso y no tengo idea que decirle. ¿Me entiendes? Es que…— di un grito ahogado y apoye los codos en mis rodillas—. No sé qué hacer.

—Yo creo que tenes que empezar por decirle la verdad. Contarle que fue lo que paso y como llegaste hasta acá. Si más tiempo tardas en decírselo, peor va a ser su reacción.  ¿Qué te parece si hoy a la noche yo cuido a Martin y tú hablas con Lali? Podría inventarle algo para que vaya a tu departamento y no huya despavorida.

—Es una buena idea. Perdón por no haberte ayudado como debería—. Hable acongojado. Me sentía como una mierda con toda esta situación.

—En realidad, si me estas ayudando, de una manera diferente a la que yo pensaba, pero ayudando en fin.

«Nunca es demasiado tarde para ser la persona que podrías haber sido».

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Como ya lo sabran a estas alturas soy malisima en los capítulos largos xD A este cap. ya lo tenia listo desde el domingo pero lo quería hacer más largo... recien me resigno a que no podría escribir más y les subo como lo tenía. ¡SE ACERCA EL FINAL! ¿Que piensan de la nove? ¿Les gusto? ¿Hay algo que no entienden y quieren que se los aclare? Las te ca eme, preciosasc: 

Yami

Capítulo 7

Capítulo 7.

{Peter}

1 mes después.

Desde la última vez que Lali vino al consultorio las cosas empeoraron notablemente. Ahora mis encuentros con ella son más escasos que antes, si eso era posible. La vi un par de veces en el centro comercial y en su departamento, cuando voy con la excusa de ver a Angie.

Su cara se me hace recordar demasiado a la nona. Es dueña de los mismos grandes ojos expresivos y la sonrisa… aquella sonrisa que puede hacerte perder la cabeza en solo un segundo.

—¡Piccolo! Mira tu ropa…—lo regañe, o eso intente. No pude evitar lanzar una carcajada. Verlo con su pequeño rostro cubierto de barro era gracioso.

—Lo siento— se disculpo Lali, apareciendo por la puerta del jardín—. Por mi culpa esta embarrado, yo solo estaba queriendo jugar con él, y bueno…— dejo la frase inconclusa. Sus ojos brillaban de culpabilidad. Ella me despertaba un instinto protector, era tan inocente.

—No hay problema, pequeña—dije guiñándole el ojo. Asegurándome de que Martin estuviera demasiado entretenido con las caricaturas como para no notar lo que sucedía  a su alrededor. Sus mejillas se sonrojaron y tenía un aspecto casi virginal, con sus joggings sueltos y remera de conejitos.

— ¿Te quieres quedar a cenar? Podríamos comer los tres: Martin, tu y yo— aclaro haciendo énfasis en Martín. En realidad, me estaba invitando por modales, pero sus verdaderas intenciones eran pasar más tiempo con Martin. No es que la culpara. Él es un niño muy agradable. Asentí entusiasmado sin poder esconder la sonrisa que asomaba por mi rostro.

Mi mente comenzó a dirigirse hacia otros lugares y me imagine una familia. Lali sería una gran madre, y si tuviésemos una hija apuesto a que se parecería muchísimo a ella. 

—Me encantaría.

Por alguna extraña razón mi corazón se habia acelerado y amenazaba con romperme las costillas si no me tranquilizaba. ¿Por qué no la pude conocer en situaciones normales? Solo me queda un mes aquí antes de que deba regresar a Italia y volver a mi monótona vida. Tenía esa extraña sensación latiente en mi pecho. Necesitaba decirle la verdad de una vez por todas. Necesitaba que sepa mis verdaderas intenciones y ponerle mis cartas sobre la mesa, o me agradecería por ser sincero antes de que las cosas vayan más allá o me odiaría. No la culparía si escogiera la segunda opción. Era estúpido tener esa sensación, lo sabía, pero no podía evitarlo. Mi vida era un completo desastre.

«Antes de que me eches para siempre de tu vida, escucha mi verdad.»

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¡Oh yeah! Ayer me devolvieron mi compuc: Estoy que salto de la alegría xD Buano, intente ponerme al ritmo de la nove para lograr terminarla de una vez por todas. Les comento que no creo que esta nove tenga más de 15 capítulos, es que las ideas se me estan acabando de como continuar, no se que me pasa:c ¿Ustedes creen que tenga final feliz? ¡¿Seguras?! Las dejo que piensen un poquito xD Se que el capítulo es algo corto, pero es lo que me salioD:

Yami

¡Holas!

¡Oh my gosh!(?) De todo lo que me perdí en estos días que desaparecí:c ¡HOLAA! Al parecer, va a haber una nueva escritora en el blogc: Le tengo que pedir a Cathe, Angie o Abi que me expliquen bien como va la cosaxD ¿Saben por qué desaparecí? Es que soy tan genia que olvide que tenía prueba de Matemática (vale aclarar que soy malisima en esa materia, ah) no había estudiado nada y saque ¡1.25! Casi me matan en mi casa-.-. PEEERO estos días que estuve sin compu, escribí varios capítulos de la nove, no son demasiado largos, pero ya tengo varios:) Y comencé a escribir una nueva nove que la subiré cuando termine "Give me a Chance". ¿Quieren capítulo hoy? Lo subo cuando vuelvo del cumple de mi amigo. Las loveo de a montones(?)
P/D: ¡QUE LOS JUEGOS DEL HAMBRE COMIENCEN Y LA SUERTE ESTE DE SU LADO! xD ¡Suerte a todas las chicas que van a participar! Cualquiera puede escribir, si yo logre escribir, nada es imposible xD Si quieren ayuda en su novela manden un mensaje a la página del blog o al tw y yo no tengo problema en leerlas o darles algunas ideas.
Yami

Capítulo 6

Capítulo 6.

{Peter}

Y ahí estaba ella con su rostro inocente y sus grandes ojos verdes abiertos de par en par a causa de la sorpresa. Mi corazón dejo de latir y mi pulso se acelero al darme cuenta que Lali me tenía miedo. Santa mierda.
Sonreí con suficiencia, Angie había tenido razón.

-Hola- la salude amablemente. Me corrí de la puerta despacio, esperando que ingresara; pero no lo hizo. Retrocedió unos pasos al tiempo que su labio inferior se curvaba hacía afuera. Ella estaba reprimiendo sus ganas de llorar. Tenía que saber que era lo que le había hecho su ex-novio. -¿No quieres pasar?

Negó y suspiro, como si hubiese cambiado de opinión.

-No... bueno, en realidad sí; vine por algo, pero creo que debo irme ya.
Hablo todo de corrido y luego tomo una larga respiración. Oh no, esto no era bueno. Yo necesitaba ser su psicólogo o no tendría oportunidad de acercarme.

-Ajá, viniste por algo y... ¿debes irte?- pregunté enarcando una ceja. -Vení, pasa. Por ahora no como personas.
Intenté  bromear pero creo que aquello la asusto un poco más. Nota mental: mi sentido del humor esta cayendo en picada.

Por los dioses, ¿alguien tenía idea de lo que yo debería hacer en este momento? Cuando acepte este trabajo pense que era lo mejor; alejarme de Italia, del pasado e intentar comenzar una nueva vida aquí, en Argentina, pero creo que las cosas no estan yendo tan bien como esperaba. Lali ya sufrio bastante y no quiero que vuelva a hacerlo, y menos ser yo el causante de ese sufrimiento.
Las cosas se empezaban a complicar. Aún no sabia hasta donde era capaz de llegar cuando acepte esto.

"Sólo nos conocemos cuando conocemos nuestros propios límites."

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¡Capítulo corto! Es que imaginación esta a enterrada a tres metros bajo tierra y la muy desgraciada no se apiado en volver, ah xD Espero que les guste, intente hacerlo más largo, ¡pero no lo consegui!:(
¡ESPEREN! ¿Peter va a lastimar a Lali? No, no, no ¡lo matamos todas juntas! Okno. ¡Nos leemos pronto si la maldita de mi imaginación regresa!
Yami

Capítulo 5

Capítulo 5.

{Lali}

Me removí incomoda entre las sabanas y al recordar mi sueño pegue un salto, terminando totalmente erguida sobre la cama. Dios, todo había sido tan real. Pablo pegándome, dejándome inconsciente, yo conectada a varias maquinas. Eso había pasado hace varios meses.  Mire al reloj de pared; las agujas marcaban las nueve de la mañana. Mierda, solo me quedaba una hora. ¡Una hora!. Me levante a la velocidad de la luz y me adentre en el baño. Abrí la ducha, esperando que el agua tomara una temperatura agradable. Jalé la remera que traía por la cabeza, saqué mi ropa interior y me metí dentro. Logre bañarme en diez minutos, lo que es tiempo record para mí. Jeans de color, musculosa, sandalias y un bolso cruzado fue el atuendo elegido para hoy; un poco de corrector de ojeras sobre las bolsas negras que se situaban bajo mis ojos, brillo labial, mascara para pestañas, y ya estaba lista. Agarre el móvil y las llaves del departamento, para después bajar corriendo las escaleras.

¿Cómo puedo ser que no encuentre un maldito taxi vacío? Cuando realice la hazaña de conseguir el taxi y ya estábamos de camino, saque el reproductor de música, me coloqué los audífonos y volví a sumergirme en los pensamientos que me torturaban todos los días: Pablo.
Al sentir que el chofer me sacudió levemente del hombro supe que ya había llegado a mi destino. Luego de pagarle y despedirme cortésmente, me pare frente al edificio que se encontraba sobre la otra calle. ¿Realmente fue una buena idea haber venido hasta aquí? Aún estaba a tiempo de irme y continuar como hasta ahora... no. Debía hacerlo. No era la gran cosa. Cruce a paso lento la avenida y abrí con dificultad las grandes puertas antiguas. ¿Quién utilizaba en este siglo esas puertas? La sala estaba decorada perfectamente, sin dejar ese estilo antiguo que se podía percibir desde afuera. Las paredes eran blancas, pequeñas butacas negras y blancas esparcidas por el lugar, sobre una alfombra tejida a mano de diferentes colores. En un rincón de la habitación se encontraba la secretaria, una señora de edad avanzada, su pelo ya había adoptada un color blanco ceniza, pero su encanto perduro a través del tiempo.

-Hola, dulzura- me dijo ella amablemente- el doctor te está esperando. Por el pasillo, la primera puerta a la izquierda.

-Gracias- balbucee, odiando el temblor en mi voz.

Seguí sus indicaciones y en el camino imagine varias formas de escaparme de aquí. Ninguna que fuera realmente coherente. Aunque, pensándolo bien, podría decir que me siento enferma e intentar volver otro día, cuando este lista... no tuve tiempo de efectuar ninguno de mis planes. El que sería mi psicólogo me estaba esperando fuera de su consultorio, de espaldas a mí. Al ver que él no notaba mi presencia, tosí incómoda tratando de captar su atención. Al fin se dio vuelta y mi respiración quedo atascada en mi garganta.

¡Por los dioses, Juan Pedro era mi psicólogo! Esto no funcionaria ni en cien años...  
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Asdasd, ¿y ahora qué pasa? ¿Cuántas de ustedes dicen que Pitt es bueno y cuantas malo? ¿Ahora entienden mas o menos como va la nove? Pasa que en el capítulo anterior varias dijeron que no entendian xD Otra cosa: Lali le dice a Peter, 'Juan Pedro' porque ese es el nombre que le dijo cuando se conocieron, nadie le aclaro como era su apodoc:
Yami

Capítulo 4.

Capítulo 4.

{Peter}

-¡Martin! Rápido, vamos a llegar tarde. 

Grite parado al pie de la escalera, con la mirada fija en la puerta del baño, donde se encontraba mi hijo. Cuando yo ya estaba seguro que llegaríamos, al menos, quince minutos tarde, él decidió que era tiempo de bajar. Tenía hecho un raro peinado y la camisa que estaba usando era varias tallas más grandes. Sonreí negando con la cabeza.

Le avise a Angie que estaba algo retrasado. Al parecer hoy la suerte no estaba de mi lado. 

...

-¿Qué hacemos acá?- Pregunto Martín con sus ojos mirando en dirección al gran edificio que teníamos en frente. 

-Vine a hablar con una amiga sobre un trabajo. ¿Recuerdas que te conté que veníamos a Argentina por qué debo ayudar a alguien?- El pequeño asintió, prestándome mucha atención en lo que le decía- Bueno, esta amiga me va a ayudar con eso. A lo mejor termine rápido con esto y podamos volver a Italia y vos volver a ver a Anne- Dije clavándole mis dedos en las costillas suavemente. -Con que te gusta tu compañerita- Utilicé un tono burlón en mi voz. 

-Nop, no me gusta. Ahora bajemos, así terminas rápido. Vos hoy me prometiste llevarme al parque.- Las palabras salieron de su boca rápidamente, dificultándome entender toda la oración.

-Mamma, no va a volver, ¿verdad? 
Pregunto Martín con sus ojos tristes, utilizando su acento italiano. Si supieras... 

Solté un suspiro antes de responder en voz baja. 

-No lo sé, piccolo. 

El incidente del auto quedo en el olvido en pocos minutos. Mientras tome asiento al lado de Angie, Martín miraba como un payaso realizaba diferente formas con un globo, a pocos metros.
Me abofetee a mi mismo al darme cuenta que no tenia ni la más mínima idea de lo que la rubia me estaba diciendo. 

-¿Entendido?- Me pregunto. 

¿Y ahora qué se supone que le responda? Ella bufo molesta y me volvió a repetir lo que debía hacer. 

-Eso es lo que debes hacer. Tienes que comenzar a acercarte a Lali, ser el hombre perfecto. No lo olvides: que se enamore de vos... o no tendrá sentido, ¿sí? 

«Solo quiero encontrarme con tu recuerdo y que no duela».
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¡Holaa! Esperen, al final, ¿Peter es bueno o malo? ¿Y Angie? o: ¡Aún no pueden saber que es ese 'trabajo' que tiene que hacer nuestro lunarcito:c ¿Qué piensan que será? ¿Lastimar a Lali o algo por el estilo? Les aclaro algo: como Pitt y Martín son Italianos a veces dicen algunas palabras en su idiomac: Como 'piccolo' que significa pequeño o 'mamma' que es mamá:) Bueno, nada, eso. ¡Dejen sus hipótesis acerca de la nove! 
P/D: si me llegue de olvidar de avisar a alguien en tw, avisenmec: 
Yami

Capítulo 3.

{Lali}

Capítulo 3.

Intenté levantarme, pero no sentía mis extremidades inferiores, estaban entumecidas, como si no fueran parte de mi cuerpo. Las gotas de sangre caían desde mi cabeza, deslizándose por la mejilla y ensuciando mi buzo. Un fuerte golpe en mi estómago me saco de mi concentración por el líquido rojo.

-¿Qué parte no entendiste sobre no hablar con ese jodido idiota?

Grito Pablo, haciendo que mi cuerpo temblara y solo fuera capaz de cerrar mis ojos, esperando los golpes que me esperaban.

-Yo... yo no hice nada- Balbucee.  ¿En qué momento mi vida se convirtió en toda esta mierda?

Su puño impacto sobre mi cara, provocando una cortadura sobre el lado derecho de mi labio. En ese momento todo lo que veía era borroso, y no pude entender nada con claridad. Sentía algo hormiguear por todo mi cuerpo y no de una buena manera. Pablo me tumbo sobre la cama y comenzó a tocar mis piernas y desabrochar sus pantalones. Él me iba a violar...
Lo último que escuché fue el timbre del departamento sonar. Estaba débil... demasiado. Me deje ir en un profundo sueño y logre obtener una paz conmigo misma que no conseguía desde hace dos años.

Cuando logre despertar, la sensación de que millones de jugadores de fútbol estaban clavando sus botines en mi cráneo persistía. Una máscara estaba ubicada en mi nariz y varias maquinas estaban conectadas por varias partes de mi cuerpo, emitiendo un estresante sonido.

...-¿Ella va a estar bien?
Logre descifrar sus palabras. Su voz. Esa infonfundible voz... la voz de Pablo.

-La joven corre peligro, su salud está demasiado delicada.

Me removí despacio entre las sabanas, intentando que no notaran que o estaba escuchando su conversación. Una mano me cubrio la frente.

-Lo siento. Yo... yo no pense que te había golpeado tan fuerte. Te amo, ¿lo sabes?. Por favor, por favor, no me dejes.

Mi mamá me estaba hablando, yo estaba sentada en su regazo mientras me leía un libro. Deje de escuchar el tedioso pitido y me concentre en poder ver más. Ella estaba tumbada sobre la cama... esa cama en la que fallecio.
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¡Capítulo cortisimo, lo se! Perdón y más perdón. Seguramente para el capítulo 4 vuelva todo a la normalidad. Ahora me voy a avisar por TW. PEEERO, ¡esperen! ¿Pablo volvio? ¡Encima Lali corre peligro! Ah, soy mala, las dejo sin capítulo tanto tiempo y encima les traigo esta maldad(? ¡Las quiero mucho y no me odien! Mi pobre panza me duele a mas no podes, ioro:'c Una pregunta: Stella Careri, ¿seguis leyendo la nove? Es que como abandone durante unos días el blog, no se quienes siguen leyendola y quienes no:c
Yami

Give me a chance

¡Hola! De nuevo yo, Yami. Primero que nada PERDÓN por dejarlas sin nove, pero es que tuve varios problemas:c Comenzando porque tome la confirmación y entre que íbamos a ensayar y eso se me iba el tiempo, después me saque una mala nota en el colegio por descuidada, se enfermo mi papá... Y por último me contagio a mi -.- ¡Anoche me querian internar! Les comento mi profundo odio a los medicos(? ah. Vine para decirles eso, y que ni bien me recupere me pongo a escribir y les subo, ¡gracias por el aguante! Parece que empecé con el pie izquierdo en el blog xD

Capítulo 2.

Capítulo 2.

{Peter}

Cuando ella fue capaz de pararse por sus propios medios y no quedar contra el piso nuevamente intento recuperar su compostura. Lagrimas negras caían una por una a lo largo de su rostro. Se concentro en acomodar las pequeñas arrugas que se habían formado en su camisa y juguetear con los dijes que colgaban de la muñeca.

— ¿Problemas en casa? — Pregunté con un tono cauteloso.

Negó con la cabeza y yo sentí a mi corazón amenazar con romperme las costillas por su ternura. Un inocente rubor cubría sus mejillas. Puso sus manos en puño, intentando disimular el temblor de éstas. Ella seguía demasiado absorta en sus pensamientos como para darse cuenta de todo lo que la rodeaba. Había algo en su rostro que me recordaba demasiado a Camile… ambas eran dueñas de la misma mirada angelical e insegura.

Logre divisar a Angie caminar apresuradamente con dos contenedores de café en mi dirección. Cuando noto que yo era el acompañante de Mariana, el ceño que se había formado entre sus cejas se suavizó y volvió a regular su paso.

—Hey, tu, hombre desaparecido— exclamó alegre— ¿cuándo has vuelto?

Me encerró en un abrazo afectuoso y me apretujo entre sus brazos. Una voz apenas audible nos saco de nuestra muestra de afecto pública.

-¿Se conocen?

— ¡Claro que lo conozco! Él es un viejo amigo de la familia, ¿ya se presentaron?

Mariana asintió y volvió a agachar su cabeza, dejándome en claro que su participación en esta conversación se había acabado.  

Luego de unos minutos nos encontrábamos los tres sentados teniendo una conversación agradable. El caluroso viento de verano removía mi cabello y hacía que algunas gotas de sudor se deslizaran por mi frente.

El tema de Martin y Camile no tardo en salir a la luz.

Sentí algo dentro de mí romperse al recordar a Camile.

— ¿Cómo fue que falleció? —Me pregunto Angie. En sus ojos podía ver tristeza.

—Tuvo un accidente automovilístico—explique—Pienso que traer a Martin aquí es lo mejor, así no notara tanto su ausencia.

Mariana rara vez participaba en nuestra charla y cuando lo hacía era para decir solamente lo necesario. Había algo en ella que me llamaba demasiado la atención. Tenía los mismos ojos que mi ex-mujer, su nariz era pequeña y contrastaba a la perfección con su boca… esa boca.

— ¿Quién es Martin? —Su tono de voz era más seguro y confiado. Mi estomago dio una voltereta y sentí que volvía a tener dieciséis años, que volvía a ser el mismo adolescente que se ponía nervioso frente a una mujer.

—Martin es mi hijo—Respondí con una sonrisa.

Mi trabajo aquí había comenzado, y sería más interesante de lo que me imaginaba.  

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¡Perdón! Se que el capítulo esta corto, pero mañana no iba a poder usar la compu, por lo que decidi subir el capítulo como lo tenía para no dejarlas un día más sin nove. ¡No tienen un idea lo que me cuesta usar el blog! ¡Me saca de quicio cada vez que quiero subir! -.- Es que yo me acostumbre al face xD 

¡STOP! ¿Peter tiene un hijo? ¿Una ex-mujer? ¡¿WTF?! ¿De qué nos perdimos? Y, por último: ¿que quiere decir la frase "mi trabajo aquí había comenzado, y sería más interesante de lo que me imaginaba?

Yami
P/D: se que en partes aparece el texto en blanco, ¡pero no sé porque pasa eso! ¿Alguien que me explique como puedo sacarlo? Graciiiiassc: 

Capítulo 1.

Capítulo 1.

{Lali} 

Coloque la última valija que me quedaba por desempacar sobre la cama. Largue todo el aire que había estado conteniendo en mis pulmones y me obligue a relajarme. Nada malo podía pasar. Todo está solucionado. Hoy comenzaría una nueva vida, junto a Angie. Lejos de Pablo... o al menos eso espero. Mi amiga entro a la habitación con una sonrisa que ocupaba gran parte de su rostro. La mire por el rabillo del ojo e intente mantenerme ocupada doblando la ropa. No quería enfrentar su mirada acusadora.

-¿Sabes que me tienes que contar, algún día, lo que ocurrió con Pablo? No digo que lo hagas ya, pero quiero saber que te hizo ese hijo de...

Al ver la cara de asco que me produjo escuchar su nombre se quedo en silencio y me miro con ojos de disculpas.

-Lo siento...- Continuo ella- No sabía que te afectaba tanto hablar de él.

-Solo... dame un poco de tiempo, ¿sí?- Dije pestañeado varias veces para no llorar- Prometo que te lo contaré, espera que yo supere toda esta situación.

Angs me abrazo sin decir una palabra. Eso era lo que necesitaba: sentir el calor de alguien conocido.

-¡Dejemos el pasado atrás! Hoy empezaremos de nuevo... sin ningún recuerdo. Estamos viviendo juntas, ese era nuestro sueño. ¡Tenemos que salir a comprar la decoración!- Hablo desesperada por apartar mi tristeza. Intente mostrarle una sonrisa, pero apuesto mi vida a que se vio como una mueca. Miro las paredes de color pastel vacías, sin nada de adornos.

-Vamos a comprar los muebles, y después, me voy a sacar un turno para el psicólogo- Dije decidida.

-Esa es mi chica.

Caminé hacía la ducha y cada músculo de mi cuerpo dolía. Me despoje de toda mi ropa y me metí debajo de las gotas de agua.

Al salir de la ducha pude ver en el espejo todo lo que Pablo me había causado. Horribles moretones. Estaban de un color oscuro y si los tocaba dolían demasiado. Puse mi mano en el vientre, tenía un gran moretón allí. Vi mi pierna, otro más, así todos ellos recorrían mi cuerpo. Me coloqué la toalla alrededor de mi cuerpo, tapando así algunas marcas que tenía en la panza pero no la de las piernas. En los brazos tenía pequeños raspones, no eran tan notorios. Y la que tenía en el ojo izquierdo la taparía con algo de maquillaje. No quiero que Angie sienta lastima por mí. Me puse mi ropa interior y me senté en la que ahora era mi cama. Volví a pararme y me observé en el espejo. Los moretones se veían espantosos, pero sanarán.

La puerta se abrió.

-Lali, te quería decir si...- Se quedo en silencio y me miro de arriba a abajo y sus ojos se cristalizaron.- ¿Esto te hizo?- Asentí, agachando mi cabeza- Te juro que lo mataré, nadie le hace esto a mi amiga.

Me abrazó cuidadosamente, teniendo miedo a lastimarme aún más. Apoyé mi cara en su pecho y lloré como nunca lo había hecho. Sentí una punzada de vergüenza recorrerme la espalda. No quería que ella me viera así, tan... demacrada.

-No quería que me vieras. No quiero que te preocupes por mí.

-Siempre me preocupo por ti, aunque no lo quieras. Tranquila, ese idiota no se te volverá a acercar.

Me acunó nuevamente en sus brazos. Luego me ayudo a terminar de cambiarme. Me dedicó una dulce sonrisa y bajamos las escaleras. Salimos camino a la mueblería. Angie se demoro en un Starbucks y yo me quedé mirando unos bellos adornos.

Mi celular comenzó a sonar.

-¿Hola?- Contesté mientras observaba un sofá color beige.

-¿Dónde estás?- Al sentir la voz detrás del teléfono mi pulso se acelero y mi respiración se volvió irregular.

-¿Qué quieres?- Intente sonar decidida.

-¿Cómo me contestas así? ¿Donde estas, mierda?

Una lágrima rodó en mi mejilla y el pasado me cayó como un balde de agua fría.

-Eso ya no importa, Pablo.

-Seguro ya te andas revolcando con otro tipo, ¿no? Siempre supe que eras una fácil. No creas que te dejare ir tan fácil.

Él hablo en tono retorcido y sentí un escalofrío recorrerme la espalda. No era tan fácil dejar la vida que había llevado por más de un año. ¿Alguna vez lograría volver a comenzar?

Quise irme de ese lugar y volver al departamento pero alguien me estaba mirando preocupado, seguramente por el número que acabo de montar.

-Lo siento... yo ya me iba.- Dije mirando el suelo apenada.

-No te preocupes. ¿Estás bien?- Asentí con mi cabeza varias veces sin levantar mi vista. Era una voz masculina. Una tierna voz... tan diferente a la de Pablo.- No, algo te pasa- Afirmo él- Mirarme- Lo repitió varias veces hasta que tuve que obedecer.

Debía tener un par de años más que yo.

-Sea lo que sea que te este sucediendo no llores, todo se va a solucionar- Continuó él- No hay mal que dure cien años...- Dijo repitiendo un viejo dicho- Ni cuerpo que lo resista.

-Nada va a estar bien- Mi voz sonó como un susurro apenas audible. Mis rodillas me flaquearon y caí derecto al piso. Él se sentó a mi lado y me abrazo dubitativo. No sé quien era pero sus brazos me reconfortaron, me hicieron sentir como hace mucho no lo hacía: protegida. 

-¿Cómo te llamas?- Me preguntó cuando yo ya estaba más calmada.

Sorbe por la nariz antes de contestar
-Mariana Esposito.

-Mi nombre es Juan Pedro Lanzani. Es un placer conocerte.

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¡Holaa! Disculpen que tarde tanto en subir la nove, pasa que nos llevaron ayer temprano a una salida con la escuela, hoy volvi, cuando quise subir no podía -.- Pero aquí ya tienen el capítuloc: MUCHISIMAS gracias a las que comentaron en la sinopsis. Si quieren que les avise en tw, dejen el suyo acá, ¿sip? Las quiero mucho

Yami  

Presentación + Sinopsis

¡Hola! Me presento, mi nombre es Yamila y tengo 12 años. Estoy súper feliz de que Abril me diera la oportunidad de compartir con ustedes el tiempo que dure mi estadía en el blog, que espero que sea mucha. No creo que sea buena escritora, no estoy ni cerca de serlo, pero es algo que me gusta demasiado y me encanta hacerlo como un pasa tiempo, uno de los pocos que tengo. Bueno, espero que nos llevemos excelente y pueda entretenerlas un rato mientras leenc: No las aburro más y le dejo la sinopsis de “Give me a chance”

Sinopsis

"... ¿y te lo hacía muy seguido?

-Solo a veces cuando, según él, hacía algo malo.

-¿Lo denunciaste? Debes hacerlo.

-Tengo miedo.

-Debes enfrentarlo..."

Terapia. Uno suele ir a terapia a desahogarse a buscar ayuda. Pero está claro que este no es el caso de Peter y Lali. Él es un psicólogo pero cuando la conozca a ella su corazón dará un vuelco y tendrá que acostumbrarse a que su felicidad dependa de alguien más. Peter sabe casi todo sobre la vida de ___... Su ex-novio violento, su problema de autoestima.

"... Es mi paciente, no puedo sentir algo por ella.

-Amor, es solo amor. Cálmate y piénsalo bien. ¿Estás seguro que la amas?

-Más seguro que nunca en mi vida..."

¿Qué pasara con este par? ¿Se enamoraran? ¿Quién se enamorara primero? Y la mayor duda... ¿Lali lograra superar su pasado y volverá a confiar en alguien?

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¡Otra cosa! Mañana yo tengo una salida escolar y vuelvo recién el jueves, por lo que mañana sube Abril y lo más probable es que el viernes les suba otro capítulo yo :) 

Yami 

NOTICION

 Hola, quiero contarles que alguien se suma a nuestro lugar mágico... Primero era yo sola, luego se sumaron Cathe y Angie y ahora, después de casi un año una gran amiga mía va a comenzar a escribir acá su propia novela, espero que la banquen como me bancan a mi. Es una gran chica, con un talento inmenso!


 Su novela es "Give me a chance" les juro que le encantará, lean esta hermosa historia y bueno... Espero que acepten a Yami con los brazos abiertos!

 LAS QUIERO

Abii...