Trió de amor (EDITANDO)

                              Trío de amor.

 Peter movió el brazo de Pablo, apuntando a una chica que acaba de entrar en la escuela, de baja estatura y cabello marrón. Peter fue el primero en acercarse a ella, seguido por su amigo unos pasos detrás.

- Sos nueva, no?-Pregunta acercándose
-Si, soy nueva-Contesta ruborizada frenando sus ojos en de él.
-Me llamo, o más bien me dicen Peter-Dice coqueto
-Mariana, pero decime Lali.
-Que hermoso nombre-Sonríe
-Mariana o Lali?-Bromeo
-Los dos. Igual que vos...
Ella volvió a sonreír algo tímida.
-Veni, sentate conmigo, así no estas sola.


 Pablo los observo irse juntos, algo molesto. Siempre se sentaba junto a Peter en clase.

-A vos te gusta? - le pregunto Peter a Pablo durante el periodo libre.
-No-Mintió él, prefería mantener oculto sus sentimientos para no perder la amistad que le quedaba.

 A medida que pasaron los días Pablo logró acercarse a Lali también, y noto con cierto rencor que ella estaba fascinada con la sonrisa brillante y el lunar, para él irritante, de su mejor amigo.

  El timbre sonó y todos se dirigieron a la clase de canto, Pablo le sonríe a sus amigos y paso a sentarse al fondo, todavía exasperado por el hecho de estar siendo dejado de lado por su compañero de toda la vida. El profesor entro, era un hombre bajo y de bigotes chistosos; y a pesar de su aspecto jocoso todos los tomaban en serio ya que sus medidas disciplinarias eran las peores del ámbito escolar.

-Bien, silencio-Grito tomando asiento, saco unas hojas y leyó algo para si mismo.-Tienen que hacer un dúo para la clase próxima, se va a tener en cuenta los aspectos de siempre. Música, letra, interpretación y por supuesto afinación.-Lali toma un papel, garabatea algo y se lo pasa a Peter a escondidas del profesor.

 ¿Haces el trabajo conmigo?

 Dale 

  Sonrió contenta y volvió su vista al hombre que seguía hablando sobre la importancia de el trabajo en equipo y otros temas que nadie escucho.

 El timbre sonó liberando a los alumnos, y a excepción de Lali y Peter todos salieron corriendo de ahí para llegar al almuerzo antes de que se acaben los postres.

-Lali-Llamo Peter antes de que ella saliera-¿Venís a ensayar a casa hoy?-
-Sí, claro. ¿Cómo llego?-
-Mira, de acá haces dos cuadras derecha, una a la izquierda  y llegas seguro. Es una de ventanas grandes, esta pintada de gris.-Lali asintió tratando de mantener en su mente cada dato.

  Volvió a su casa, con una amplía sonrisa en su rostro.

-Hola, mamá-Saludo evidentemente feliz.
-Hola, bebé.-
-Tengo que hacer un trabajo con un compañero, ahora, ¿Te jode?-
-No, para nada ¿Queres que después te valla a buscar?
-No, estoy bien.-Sonríe y besa su mejilla otra vez.

  Deja su bolso y toma su chaqueta por si hacía frío más tarde. Peter era un chico interesante, lindo, divertido y era su amigo. A lo mejor tenía algunas posibilidades con él en el futuro.  A pesar de sólo tener unos días de relación era obvia la química que existía entre ambos, y no era algo que ella fuera a obviar.

-¡Ya me voy, mamá!-Salió de la casa y fue hacía la escuela, a pocas cuadras de ahí. Siguió las indicaciones que esa tarde le había cedido su amigo intentando no olvidar ningún detalle. Al llegar no le fue difícil encontrar la modesta casa gris con grandes ventanales, reviso su ropa antes de acercarse y decidió que cambiarse la falda hubiese sido una buena opción, haría frió para cuanto terminarán.

 Se acerco a la puerta para tocar el timbre cuando una imagen quebró su visión, Peter abrazaba a otra chica que sostenía un ramo de flores en sus manos.

-Te quiero, pequeño idiota.-La oyó gritar, era evidente por su voz que había llorado, pero no era un llanto de tristeza si no más bien de emoción.

 Se sintió como una completa idiota, y lo único que pudo hacer fue correr hacía su casa de nuevo, pero esta vez estaba perdida. No sabía hacía donde debía correr. Se sentó en el suelo rendida, intentando no llamar demasiado la atención. Maldecía la hora en que su madre había perdido su teléfono.

 Su propio móvil suena en el bolsillo de su chaqueta, el identificador indica que es Peter.

-Hola, La-Oír su voz le molesta en este momento, le da ganas de llenar su cara de moretones.
-¿Qué pasa, Peter?
-Llamaba por el ensayo, nunca apareciste.
-Lo siento yo... No voy a poder ir, ensayamos otro día.-Cortó rápido y hundió su cabeza.

-¿Estás bien?-Pregunto una familiar voz sobre ella, alzo los ojos y se encontró con Pablo frunciendo el ceño en un gesto de preocupación.
-Y-yo, me perdí-Admite agachando sus ojos de nuevos, Pablo extiende su mano y luego de un instante ella la toma.
-Vamos, te acompaño.-La levanta y la conduce hasta su auto.-¿No trabajabas con Peter?-
-¿Cómo sabes?-Pregunta confusa tratando de quitarse las lágrimas de decepción que habían llegado a salir.
-Siempre hacemos esto juntos y hoy vino a avisarme que había arreglado con vos.
-Ah, lo siento, no sabía eso...-
-¿Por qué no ensayaron?-Vuelve a preguntar.-
-Lo encontré muy ocupado y decidí irme.-Confiesa sin más, no quiere dar más declaraciones.-
-No es bueno dejar a una chica tan linda sola a estas horas, al menos debió avisarte.-Acaricia su mano apoyada en el asiento. Lali lo miro a los ojos mientras frenaban en su casa.-No tiene sentido que estés mal por él, pero si necesitas consuelo o algo por el estilo quiero que sepas que yo estoy acá.-Lali torció los labios en un gesto de aprobación, miro a Pablo, él tenía unos dulces ojos y actitud sensible y divertida. Era un chico casi perfecto, no valía la pena sufrir por Peter teniendo a alguien así  a su lado. Rodea su cabeza con sus manos y le da un suave beso.

-¿Y eso?-
-Lo siento si estuvo fuera de lugar-Intenta explicarse comprendiendo la idiotez que acababa de hacer.-
-No, no, para nada...-Sonríe y le da el también un beso-De hecho me encanto.

 La sonrisa de Pablo se borro de su rostro, miro a Lali por unos instantes.

-¿A vos no te pasaban cosas con Peter?-Pregunta.
-No... A mí, a mí me gustas vos-Sonríe y acaricia una de sus mejillas.
-Sos tan linda, Lali.-Se acerca a ella y comienza a besarla, feliz, jamás creyó poder tener una oportunidad con ella. Apenas se alejan ella ve a Peter, parado frente a la camioneta con signos de confusión en su mandíbula apretada.
-Ahora entiendo por que no llegaste al ensayo.-Asiente y sale del lugar.
-¡Peter!-Grita Pablo bajando de la camioneta, él frena a medio camino y gira sobre su eje.
-¿Qué?-Espeta molesto.-
-Ustedes necesitan hablar, quédate con ella. Te presto el auto para que vuelvas después.

 Le tira las llaves, ceder ante su amigo era algo común entre ellos, pero esta vez tenía la esperanza de que ellos se arreglarán como amigos y pudiese tener el camino libre con Lali, además si a ella realmente le pasaban cosas con él se lo diría al día siguiente, en la escuela.

-¿Qué paso con Pablo?-Cuestiono Lali mirando al morocho alejarse de ella, Peter cerro de un portazo.
-Consideró que teníamos que hablar.
-No quiero hablar con vos-Gruño. Él giro sorprendido.
-¿Paso algo? No vas al ensayo, vengo y te veo a los besos con Pablo y ahora encima estas molesta conmigo.-Ella se mordió el labio inferior.
-Sí fui al ensayo.-Él le lanzo una mirada confundida-Pero te vi con tu novia y no quise interrumpir, Pablo me encontró y me trajo hasta casa. Y no estoy molesta, sólo que consideré poco profesional llegar y encontrarme con ese espectáculo, pero en realidad no debería importarme-Soltó.

 Peter sonrío, su supuesta novia era tan sólo su prima recién llegada de sus vacaciones de tres años. Eran inseparables, casi como hermanos y ella llego dando una gran sorpresa a todos. Iba a aclarar el malentendido pero decidió a tiempo que si ella estaba con Pablo, ya no había razón para hacerlo.

-Lo siento.-Sólo dijo. Lali asintió y salió del auto, entro a su casa sin mirar ni una sola vez en su dirección.

 Aviso a su madre que estaba devuelta pero nadie contesto, subió las escaleras hasta su cuarto pensando en todo lo sucedido en poco más de una hora, tenía una sola pregunta en su mente: ¿Por qué había besado a Pablo?          

  Se durmió con esa imagen en su rostro, y el vago recuerdo de esos ojos verdes sobre ella.

  Al día siguiente llego al colegio con poca energía, no sabía como mirar a Peter ese día.

-La-Grito alguien detrás de ella, giro sobre su eje y vio a Pablo sonriente-Tengo que hablar con vos.
-Decime...-Él tomo su mano y la condujo cerca de la biblioteca, un lugar donde casi nadie aparecía.
-Mira, vos a mi me re gustas y como ayer me dijiste que te pasaba lo mismo-Notó que su voz estaba algo temblorosa.-Me gustaría que seas mi novía.
-¿Tu novia?-Pregunto sonriente.-
-Si no queres esta todo...-
-Sí, si quiero.-Le da un suave beso-Obvio que quiero.

  Pablo volvió a unir sus labios con los de Lali, sin notar a Peter mirándolos con profundo dolor la escena ante ellos.
-La ¿Te parece si vamos al cine esta noche?-Susurró
-Me re parece, lindo-
-Que hermosa que sos!-Se acerco y volvio a besarla, Peter tuvo que irse, ya no sabia que hacer.

  Mientras se alejaba una chica se cruzó en su camino impactando contra él, la miro reconociéndola: Eugenía. Una joven que había confesado estar enamorada de Peter pocos meses atrás.

-Euge...-Sonrío.
-Hola-Contesto sonrojada-
-Esta noche vamos al cine, te paso a buscar a las ocho.-Afirmó sin esperar confirmación. Le pareció oír un destello de alegría.
.

Cuenta Lali

 Entre al cine de la mano de mi ahora novio, inspeccionando el lugar en busca de dos asientos libres, aunque apresurándose Pablo me llevo a los últimos asientos. Me rodeo con sus brazos acercándome a él, sonreí.

-¿Ese es Peter?-Pregunto girando sus ojos hacía él pasillo, me gire y lo vi de la mano de una rubia muy mona, una chica que aún no conocía pero había cruzado en los corredores de la escuela.

No entendía que hacia ahí, pero no debería importarme. Yo tenia que pasar una linda noche con mi novio, no estar preocupando y poniéndome nerviosa ante su presencia. Note que su acompañante no era la misma que la que estaba en su casa, no era difícil deducir que Peter Lanzani era un pirata.

 Se sentaron unos asientos más adelante de nosotros.

  La película comenzó, pero las risas de la rubia no me dejaba prestar atención. Sus estúpidas risas llegaban a mis odios.

-Pablo, ¿Te jode si nos vamos? No me siento muy bien-
-No te preocupes, vamos.-Esperaba que no notará que de hecho quería huir de Peter, las cosas entre nosotros venían muy bien como para arruinarlas ahora.



- Mañana salimos de nuevo si queres. Esta noche estuve un poco colgada.-Admito.
-Bueno mi amor, mañana salimos.-Sus palabras chocaron contra mi pecho y no pude evitar sonreír, jamás nadie me había llamado así.
-Hasta mañana entonces-
Me dio un tierno beso, él era tan lindo, tan tierno, tan todo. Pero no era Peter. Por alguna extraña razón había algo en ese tarado que me gustaba, me envolvía y me atraía. Necesitaba a Peter, pero ahora me conformaba con Pablo.

  Me daba pena hablar así, "Conformarme con Pablo" sonaba como si él fuese un premio consuelo, y quería creer que no lo era. Merecía mucho más de lo que podía darle.

 El sonido del móvil en mi bolsillo me saco de mis pensamientos, atendí sin si quiera prestar atención al identificador de llamadas.

-Hola-Saluda alguien del otro lado, aunque su voz sale carraspeada y no me permite saber de quien trata.
-Quien habla?
-Lali... Soy Peter.-Gire mis ojos, era extraño no haberlo reconocido.
-Que queres?-Pregunto enojada. No necesitaba hablar con él en este momento.
-Sos feliz con Pablo?-Soltó de la nada.
-Si, por que?
-Mira para afuera-Me asome por la ventana y el estaba ahí, parado con su sonrisa más triste.
-Tus papás se acaban de ir. ¿No?-No lo hizo en forma de pregunta, si no más bien como una afirmación.
-Si
-¿Puedo entrar?-Lo consideró unos segundos, y le hago una seña para que entre. Lo veo abrir el pomo de la puerta y subir hasta mi cuarto, entra y cierra fuertemente.
-No puedo verte con Pablo. Me gustas mucho.... Y vos lo sabes-Admite, mi corazón comienza a latir a un ritmo peligroso. No, él no va a confundirme.
-Peter, vos sos un pirata. No quiero nada con vos.-Logró articular.-
-Pirata ¿Yo?-Ríe descreído-¿Quién te dijo eso?
-Si, vos. Andate, no tengo ganas de hablarte ahora.
-No, no me voy a ir-Se sienta en la cama cruzando una pierna sobre la otra.-Realmente es cómodo acá-
-¿Que queres?-Pregunto ya agotada.
-Hacerte feliz - Se acercó a mi con la peligrosa intención de besarme, mis sentidos se recuperaron y me ayudaron a moverme lejos de él.
-No, Peter... Yo estoy con Pablo.-
-¿Sos feliz con él?
-Si, soy muy feliz con él, ya te lo dije.
-¿Segura?
-Si... No jodas Peter anda, haceme el favor
-Pero...-Intenta excusarse.
-¡Pero nada! Chau.
-Bueno, me voy. Pero yo se que no sentís nada por el petiza-Lo miro de arriba a abajo.
-Lo de petiza estuvo de más
-Si, ya se.

  Se acerca a mí y besa mi mejilla, luego se aleja dejándome confusa en la soledad de mi cuarto.

 Al despertar por la mañana mi estómago crujía de una forma peligrosa, baje a desayunar. Mi madre no estaba y  la alacena permanecía vacía. Me vi obligada a hacer las compras. Me vestí y camine las tres cuadras que me separaban del almacén más cercano.

  Me encontré con la risa de Pablo junto a una chica, en el stand de golosinas. Me acerque a ellos con el corazón en la boca, esto no podía estar pasando de nuevo.

Me acerque a ellos
-Hola mi amor- Me dijo Pablo-Ella es mi prima, Rocio
-¿Tu prima?-Pregunte con alivio
-Si.¿Vos sos Lali? Poli me hablo mucho de vos.-Mi cara cambio, le sonreí.
-Si, soy Lali es un placer conocerte.-Extendí mi mano y ella la estrecho.
-Igualmente
-La, ¿Salimos esta noche al final? ¿No te arrepentiste?-Bromea
-¿Porque me voy a arrepentir?
-Solo me aseguraba, linda. Hasta la noche- Me dijo y me dio un beso. Es icreible que halla desconfiado de el.
Vino a casa una compañera de colegio, se llama Candela, es muy copada, se convirtio en una gran amiga.
-Y La, que onda con Pablo?
-Es un tierno, hoy vamos a salir
-Yo también salgo con un chico hoy.
-Con quien?
-Con Vico
-Ah, si lo conozco.
-Es un tierno. Hablando de otra cosa, que bien que cantas!
-Gracias
-Con quien haces el trabajo a duo?
-Ni me hables de eso... La hago con Peter- Mi cara cambio, teniamos ensayo ese día
-Que te paso?
-Tengo que ensayar hoy, me re olvide
-Ahora?
-Si, pero no voy a ir- Ella recibio un mensaje
-Anda tranquila. Vico me quiero ver.

Me cambie y fui ao de Peter. El estaba mirando la televisión.
-Viniste... Crei que no ibas a venir...